Vittoria Corsa: Las cubiertas para rodar como un auténtico profesional

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Foto: Vittoria

La de Vittoria es otra de esas muchas historias que envuelven al ciclismo, la de una pequeña fábrica de neumáticos nacida en 1953 en Madone, una localidad cercana a Bérgamo en pleno corazón de Lombardía.

Y que gracias a su buen hacer y a suministrar ruedas a los grandes campeones de siempre consiguió expandirse tras más de cinco décadas de vida para convertirse en un gigante global y, de paso, dominar el mercado asiático habiendo sabido buscar las alianzas adecuadas para producir una media anual de nueve millones de neumáticos.

Dentro de la carretera, la madera de la pista y también de los caminos de la montaña, Vittoria siempre ha rodado con grandes campeones, sin ir más lejos con las 28 medallas ganadas en los pasados Juegos Olímpicos de Río 2016 o las cubiertas –no tubulares- Corsa Control con los que Tom Dumoulin se proclamó campeón del mundo contrarreloj en Bergen 2017.

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Además, cinco equipos World Tour y un extenso listado de equipos Pro Continentales y también femeninos al más alto nivel compiten, entrenan y devoran miles de kilómetros al año con sus productos. Por no decir que esta marca de la V y la bandera italiana también es la que suministra el servicio de competición en el Giro y en las principales carreras transalpinas. Pocas marcas, por no decir ninguna, pueden presumir de esta presencia al más altísimo nivel.

Pero si Vittoria presume de algo es de haber revolucionado su sector gracias a un material como el grafeno. Desde el año 2000, esta empresa se focalizó en desarrollar e innovar con nuevos métodos, como introducir el algodón en las cubiertas, las cámaras de látex o la combinación de cuatro compuestos diferentes (4C) en cada neumático, pero nada fue tan revolucionario y exitoso como el grafeno. Se trata de un material que deriva del carbono, específicamente del grafito. Cuenta con unas propiedades que cubre mejor la superficie molecular y que es doscientas veces más fuertes que el acero y seis veces más flexible.

Tras probar, el reto de Vittoria fue construir sus cubiertas y tubulares de ese material, más allá de criterios puramente físicos para centrarse en la práctica. Es decir, buscar mayor velocidad, agarre, durabilidad y protección contra los pinchazos.

En su amplio catálogo de neumáticos de carretera, destacan los muy conocidos por el gran público Corsa, Rubino, Zaffiro y otra específica de triatlón, bautizada con este mismo nombre genérico. Las cubiertas Vittoria que testamos en su día en Zikloland de la mano de Ridley, en nuestra experiencia en la Lieja-Bastoña-Lieja Challenge fueron las Corsa con la medida de 700×25.

En las cotas de la Decana de las clásicas pudimos comprobar sus altas prestaciones y su agarre, dotando además a nuestra bicicleta Fenix de un aspecto absolutamente profesional gracias a su diseño, que utiliza el color y las formas de un auténtico tubular, es decir, con sus paredes laterales –las que no están en contacto con el asfalto y sí con la propia llanta- con el característico color de las propias fibras.

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Foto: Vittoria

De cara al usuario, estas Vittoria Corsa son una apuesta segura pero en esta versión de cubierta más cámara sin necesidad de ir al tubular, su destino final bien puede ser un uso competitivo o casi competitivo, es decir, que la monten todos aquellos ciclistas que prefieren ir rápido y no busquen un neumático tan ligero o menos duradero que por ejemplo, el Vittoria Rubino Pro Endurance, por citar algún ejemplo de los que nos ofrece esta legendaria marca italiana.