Los hermanos Izagirre ponen cerco a la París-Niza

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Izagirre, en el kilómetro final de Valdeblore la Colmiane. Foto: Bahrain-Merida

Lo habían dicho en público los dos. Ion y Gorka se echaron mucho de menos en las carreras durante la temporada 2017. Y es que la separación no estaba prevista, pero Bahrain-Merida llegó a la puerta de Movistar con la intención de saltar la banca y se llevó al menor de los dos como alternativa a las carreras en las que Nibali no estuviera.

Sin embargo, casualidad o no, Ion no dio el mismo nivel de 2016 por el infortunio en la crono inicial del Tour que se tradujo en lesión y le obligó a despedir la temporada, no consiguió ninguna victoria. Se cayó también en la crono de Andalucía, cuando estaba peleando la carrera. Sí logró el podio en la Itzulia, y después en el Nacional de ruta. Pero no era el mismo.

Gorka, en cambio, conseguía reabrir su racha ganadora después de casi tres años de sequía. La Klasika Primavera en Amorebieta primero, y una fuga magistralmente resuelta en el Giro después, le hicieron dar un paso adelante en cuanto a nivel y consistencia. Pero tampoco estaba del todo a gusto lejos de su hermano. Así que en verano, con el contrato a punto de expirar, firmó también por la suntuosa escuadra bahreiní.

Los Izagirre se retroalimentan y su complicidad en carrera es un punto a favor cuando están juntos. De ahí que en esta París-Niza se hayan puesto a jugar los dos, atacando uno y secando el otro las respuestas de los rivales para luego cambiar papeles mientras las fuerzas lo permitieran.

Ahora, con la última etapa de esta París-Niza por delante, Ion y Gorka ponen cerco al maillot amarillo de Simon Yates. Son segundo y tercero, respectivamente, a 11 y 12 segundos del británico: “Va a ser una etapa muy emocionante. Estamos deseando que empiece”, decía Ion tras la jornada de ayer en Valdeblore la Colmaine, donde fue durante mucho tiempo con Yates mientras su hermano se soldaba a cualquier rueda que intentarla alcanzarlos: “Sabíamos que iba a atacar. Me fui con él, pero me faltó fuerza para seguir su último ataque”.

Son sólo 110 kilómetros pero sin un simple respiro. Los hermanos Izagirre son mucho más fuertes y peligrosos juntos. Dos bazas que sitúan a Bahrain-Merida como el equipo que deberá tomar el peso ofensivo en esta última jornada de la ‘Carrera hacia el Sol’. De momento, Ion y Gorka están a punto de hacerse una foto juntos en el podio de una carrera WorldTour. Tal vez uno de los dos se caiga de ese ‘cajón’, pero lo que es seguro es que lo hará por tratar de llevar al otro a lo más alto.

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