Caso Aderlass: Muchas incógnitas un año después
Denifl celebra la victoria en Los Machucos en La Vuelta 2017. Foto: Unipublic/PhotoGomez Sport
El mes de febrero de 2019 trajo un escándalo de dopaje que en un principio golpeó a varios esquiadores, pero que a lo largo de los meses acabó afectando también a algunos ciclistas profesionales. Un año después, muchas dudas siguen sin ser resueltas y, curiosamente, no ha habido la misma presión que se sintió con la Operación Puerto. El caso Aderlass ha dejado unos cuantos sancionados, pero también muchas incógnitas por despejar.
Aderlass es un caso vinculado a un médico: Mark Schmidt. La colaboración de la policía de diferentes países permitió descubrir que este doctor seguía realizando transfusiones sanguíneas a un buen puñado de deportistas. En marzo de 2019 ya se habló de 21 atletas de diferentes especialidades, con mención especial para esquiadores. En el caso del ciclismo, pronto comenzaron a salir nombres: Stefan Denilf y Georg Preidlerfueron los dos primeros.
Más tarde aparecieron vínculos con otros nombres del pasado: el famoso sprinter Alessandro Petacchi, retirado en 2015, fue castigado por el uso de sustancias dopantes en 2012 y 2013. Lo mismo sucedió con corredores de menor nivel como Kristijan Koren, Kristijan Durasek o Borut Bozic.
Kristijan Koren. Foto: S. Yuki
El último nombre en aparecer ha sido el de Pirmin Lang -corrió en la élite con el IAM entre 2013 y 2016-, quien ya se había retirado a finales de 2017 y ahora estaba trabajando ya como manager de un equipo suizo de formación. Su nombre ha saltado en febrero de 2020, es decir, un año después de que estallara el caso y sin que se sepa por qué del retraso de estos anuncios oficiales.
La confesión de Pirmin Lang:
— Pirmin Lang (@pirulang) 21 de febrero de 2020
Si la Operación Puerto siempre ha sido considerada internacionalmente como una chapuza por la falta de sanciones y los retrasos en la difusión de los nombres -incluso a día de hoy siguen sin poder ser anunciados ni castigados-, el caso Aderlass no ha ofrecido mucha más transparencia y, un año más, tarde se sigue sin dar respuesta a las dos cuestiones básicas para estas investigaciones policiales: si están todos los que son y si son todos los que están.
Los sancionados y anunciados lo han acabado por reconocer, así que no hay muchas dudas en ese apartado. Pero un año más tarde aún no se puede dar por seguro que no haya más nombres a los que todavía no se haya identificado y que aprovechando la lentitud hayan optado por salir de la primera línea de escena.
