BH Ultralight EVO 8.5: Ligereza evolutiva (Test)

BH Ultralight EVO 8.5: Ligereza evolutiva (Test)

Cuando BH se puso en contacto con Zikloland para ofrecernos probar la Ultralight EVO 8.5, el mero hecho de poder disfrutarla ya nos hizo una especial ilusión. Anteriormente habíamos probado y reseñado aquí modelos como la RS1 o la G7 Pro. Pero esta experiencia con una Ultralight con frenos de disco y cambio automático era subir de nivel. ¿Por qué? Muy sencillo de explicar y seguro que la respuesta encuentra la complicidad de todos los lectores.

El probador que escribe estas líneas, y que ha exprimido durante un buen puñado de kilómetros la BH Ultralight EVO 8.5, cuenta con una anterior versión de la BH Ultralight entre sus bicis personales, por lo que poder experimentar este cambio es suficiente motivo de ilusión no sólo por el hecho de poder comparar sensaciones, sino también por -si se permite la expresión- tener un criterio formado y poder aportar algo de valor añadido. De esta forma, tal vez, a nosotros también nos hará especial ilusión si quien lea esta prueba también puede disfrutar con nosotros al compartirle nuestras sensaciones.

Tras esta aclaración ilusionante, vamos a la BH Ultralight EVO 8.5, la tercera en la gama Ultralight por debajo de la EVO 9.5 y la 9.0 y por delante de la EVO 8.0, la única de estas tres versiones que cuenta con cableado frontal por fuera (ver galería de fotos).

De hecho, además de incorporar el freno de disco, el cambio más vistoso y llamativo de esta Ultralight respecto a sus antecesoras con freno convencional de zapata es esa limpieza de cableado, bautizado como sistema ACR. En este sentido, el manillar integrado EVO Monocoque ACR hace el resto para que esta integración sea total y el conjunto de la bici tenga esa estética actual con un manillar plano y la dirección también integrada e invisible, ya que el sobrante del tubo de la horquilla no va tapado con los espaciadores al uso.

Desde que BH lanzó este modelo ligero y con alma puramente competitiva, también repetía con el paso del tiempo que es una bicicleta minimalista y “radicalmente deportiva, exigente con el corredor y nacida para la competición y para escalar puertos”. Ese ‘nervio’, su ligereza y su comportamiento cuesta arriba, especialmente cuando nos ponemos de pie en las rampas más exigentes y la batimos, lo sigue conservando intacto.

La ligereza y su rigidez, que BH califica de “extrema”, también ayudan a marcar diferencias. El peso anunciado del cuadro el talla S es de 750 gramos de peso y sus líneas se conservan finas, sin romper en absoluto con sus antecesoras. En esas líneas radica esa máxima rigidez vertical y lateral, con tres zonas clave que garantizan esa solidez y resistencia del cuadro: el tubo de sillín ensanchado en la zona de pedalier, la pipa de dirección con rodamientos 1,4” y que la hacen un poco más ancha que modelos anteriores y, en tercer lugar, la caja de pedalier BB386 para no comprometer la rigidez y, por supuesto, para ayudar a transferir esa potencia que generan nuestras piernas.

El cuadro de carbono monocasco combina fibras de carbono Toray T800 y carbono Pitch Fiber en las zonas críticas. Ampliando un poco más este punto, el cuadro está construido al cien por cien con fibra de carbono con la técnica de vaciado interior, ‘Hollow Core Carbon Technology’. Este sistema exclusivo, tal y como nos explica BH, “consiste en aplicar una alta presión interior en el molde con lo que se alcanzan los más altos niveles de material compacto, se eliminan las presiones inconsistentes y se evita que se creen burbujas e imperfecciones en el carbono”.

Un elemento nuevo que entra en juego en la BH Ultralight EVO es la parte trasera ‘compact stay’, que se trata de una única pieza de carbono que ha sido diseñada con unos tirantes específicos que transmiten muy reactivamente la potencia del ciclista al pedalear.

Contar con frenos de disco, además de las ventajas, mejoras y seguridad que supone respecto a los frenos de zapata, también permite junto con el diseño del cuadro, un paso de neumáticos de hasta 30 milímetros de balón, algo que añadirá comodidad y también un toque extra de seguridad sin afectar excesivamente a nuestro rendimiento.

En cuanto a mejoras estéticas y también aerodinámicas, también llama la atención su nuevo sistema de cierre integrado. Se levanta la solapa bajo entre la tija del sillín y el tubo superior y podemos apretar para regular su altura o conectar cuando sea preciso la batería del cambio electrónico Shimano Ultegra Di2. Aunque, ojo, este paso sólo hay que hacerlo una vez montada por primera vez, ya que la centralita del sistema de cambio de Shimano y la entrada de la clavija para cargarlo está instalada de forma muy discreta en la zona baja derecha del manillar.

En cuanto a su geometría destaca su corta distancia de vainas, un elemento fundamental para lograr la mejor transmisión de la potencia, gran sensación de agilidad y la mejor aceleración posible, es decir, una bicicleta muy reactiva. Unido a su línea compacta con semi slooping configura una bicicleta de alta competición ideal para las ascensiones más duras. En este punto hay que añadir que BH “talla poco”, es decir, conviene consultar muy atentamente todas las medidas y geometría en la web de BH o ponernos en manos de profesionales en los puntos de venta oficiales para elegir nuestra talla perfecta.

La BH Ultralight EVO 8.5 y el resto de montajes de la gama está disponible en cuatro tallas: SM (Pequeña), MD (Media), LA) y la XL equivalente a una 58. Respecto a los colores, cuenta con cinco de serie: blanco con tonos grisáceos, el verde azulado que corresponde al modelo de esta prueba y otros tres que combinan negro con grises, gris oscuro con rojo y otro predominante naranja. Se pueden ver todos en la web de BH pero también hay que tener en cuenta que la firma vitoriana, además de poner a disposición del cliente esta variada carta cromática, pone por primera vez en la Ultralight su programa de personalización BH Unique, por lo que se puede personalizar al cien por cien el diseño con hasta 32.000 combinaciones de colores diferentes.

El precio de este modelo, con montaje de grupo electrónico Shimano Ultegra Di2 y unas ruedas de perfil EVO 38 Disc V3 es de 6.299 euros. Un precio ajustado a estas características y mucho más asequible que los montajes superiores de sus dos ‘hermanas mayores’.

Descrita la bicicleta y todas sus características, toca dar paso a las impresiones y las sensaciones. Pese a que en esta prueba estábamos sugestionados por el comportamiento del un anterior modelo de BH Ultralight y, por tanto, ya intuíamos qué podríamos encontrarnos en este cambio, desde las primeras pedaladas ya notamos que es una máquina diseñada para ir deprisa, ya sea agarrando bien la cruz del manillar y dando gas en un puerto tendido o bien cogiendo las manetas o el manillar desde abajo y tratando de arrancar.

Si bien es cierto que en las salidas con esta BH Ultralight EVO 8.5 sólo hemos apretado en momentos puntuales y esas arrancadas no han sido feroces acorde a nuestro estado físico, sí han servido para dejarnos muy claro que en cuanto exiges, la bici responde. Y esa ligereza, más allá de su peso o su propio nombre, se nota muchísimo en una bici escaladora a la hora de manejarla en ascensos y, como señalábamos anteriormente, cuando nos ponemos de pie y la batimos de lado a lado.

Su alma y diseño de competición también se nota rodando en llano, pese a no ser un modelo tan marcadamente aero como el G8. Con la precisión y rapidez de un cambio electrónico del excelente funcionamiento del Shimano Ultegra Di2 y unas ruedas con de perfil medio-alto, también es más fácil mantener velocidades elevadas o tener esa capacidad de respuesta de todo su conjunto cuando apretamos.

La evolución, se nota. Y podemos afirmar con rotundidad que mejora a la propia bici nos gusten más o menos los frenos de disco o que éstos puedan añadirle unos gramos extra de peso al conjunto de la bici. Y poder sentir esas mejoras para poder contarlas posteriormente es esa ilusión a la que hacíamos referencia al principio del texto. Una BH Ultralight es mucho más que un cuadro ligero o una bici escaladora o con alma competitiva. Es una obra que BH ha sabido rediseñar y adaptar a las exigencias del presente. Aunque ya era difícil mejorarla.

FICHA TÉCNICA:

PVP 6.299 euros

Cuadro: Ultralight Evo Disc ACR Carbon Monocoque

Horquilla: Ultralight Evo Disc, Integrated Tapered Full Carbon 1.5″

Potencia: EVO Monocoque ACR

Dirección: FSA ACR

Manetas cambio: Shimano Ultegra DI2 Hydra

Cambio trasero: Shimano Ultegra DI2

Desviador: Shimano Ultegra DI2

Pedalier: FSA SLK 52/36

Cassette: Shimano Ultegra 11/30

Cadena: FSA TH-CN1102

Freno delantero: Shimano Ultegra Hydraulic

Freno trasero: Shimano Ultegra Hydraulic

Set ruedas: EVO 38 Disc V3

Cubiertas: Hutchinson Epsilon 700 X 25

Sillín: Prologo Dimension

Cierre sillín: BH Ultralight Integrated

Tija: BH EVO 27,2

Manillar: EVO Monocoque ACR

 

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