Yorkshire 2019, el Mundial de las innovaciones

Apenas nos estamos recuperando de la resaca de Innsbruck -que aquí en España ha sido bastante acusada, por otra parte- y ya se van desvelando los diferentes detalles de la próxima cita arcoíris, que tendrá lugar dentro de un año en Yorkshire (Reino Unido).

Una prueba que, además, tendrá una serie de innovaciones de calado con respecto a lo vivido este año. Por ejemplo, en Innsbruck se vivió el final de la contrarreloj por equipos en marcas comerciales. En su sustitución, la UCI ha decidido implantar una nueva modalidad: una crono colectiva, sí, pero mixta. Será en principio por selecciones y el presidente de la UCI, David Lappartient, lo ha definido como «un paso más hacia la igualdad de géneros en el ciclismo».

Además de este nuevo formato, que habrá que ver cómo resulta, también habrá otra novedad. Y es que Yorkshire acogerá por primera vez también los Mundiales de Paraciclismo al mismo tiempo, que además serán clasificatorios para los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. Todo empezará el día 21 de septiembre y se alargará hasta el 29.

Repechos y, sobre todo, mucha distancia

El propio Lappartient tiene las expectativas altas sobre este evento, ya que asegura estar convencido de que será «un acontecimiento magnífico» en un lugar que, tras la salida del Tour de Francia 2014 y con el Tour de Yorkshire celebrándose año tras año, ha visto en primera persona el crecimiento del ciclismo en las últimas temporadas.

Los recorridos tienen la complejidad técnica y la incomodidad -constantes cambios de ritmo, repechos- como señas de identidad, pero también las largas distancias que se prevén en cada carrera. Por ejemplo, el Mundial sub23 tendrá 192 kilómetros de recorrido. Con una subida de casi tres kilómetros al 8,6% de media como punto fuerte. Ese circuito de Harrogate, epicentro de todas las carreras, es técnico y correoso por lo que el perfil de clasicómano puede ser el que tenga más éxito.

Si la prueba sub23 es larga, en el caso de la elite masculina hablamos de 285 kilómetros. La segunda prueba más larga de todo el año, sólo por detrás de Milán-San Remo que la supera por poco. Nos iríamos, como en Innsbruck, a prácticamente siete horas de carrera. Los junior tendrán que hacer nada menos que 144, probablemente esta sí la más larga de la temporada para ellos.

También para las féminas serán pruebas realmente largas. Las juveniles tendrán que cubrir un total de 91 kilómetros, una distancia propia de muchas pruebas elite femeninas. Y éstas, por su parte, harán 150 kilómetros. Quizás sea la prueba que menos distancia tenga de todo el menú de carreras en línea, aunque la parte anterior al circuito de Harrogate es muy dura.

Crono en zona de viento

Por otra parte, las pruebas contrarreloj se realizan en una zona donde el viento suele hacer acto de presencia. Y eso significa, claro, que la prueba estará muy probablemente marcada por la presencia del aire. Serán un total de 54 kilómetros a recorrer para los hombres elite, por 33 que harán los hombres sub23 y las elites féminas. En junior la cosa cambia: 28 kilómetros para los chicos y 14, con los tres últimos en subida, para las chicas.

Y la crono mixta también constará de 28 kilómetros, distancia sensiblemente más corta que la que se preparaba en las contrarrelojs por equipos de firmas comerciales que había hasta ahora. En cualquier caso, probar cosas nuevas nunca está de más, y aún está más justificado si se trata de una idea para dar un impulso a la igualdad en este deporte. Yorkshire se perfila como el Mundial de las innovaciones. Veremos si funcionan todas.

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