Roglic deja en Eslovenia su carta de presentación para el Tour
Foto: Tour Eslovenia
Primoz Roglic sigue dando pasos para firmar una temporada envidiable, al nivel de los mejores del pelotón. El esloveno ha explotado definitivamente a los 28 años, dando un elemento más a esa generación de 1990 de la que se hablaba hace ya varios años: Quintana, Sagan y Tom Dumoulin son los mayores ejemplos de ella. Y ahora Roglic parece haber llegado para quedarse.
A falta de la contrarreloj final, donde claramente es el mejor de todos los inscritos en la carrera. Y tiene una ventaja de 32 segundos, por lo que presumiblemente ganará la carrera. Después volverá al Tour de Francia por segunda vez en su carrera deportiva, donde ganó etapa el año pasado en Sèrre Chevalier, la jornada en la que se subía el Col del Galibier.
«Me sentí mejor que el día anterior», dijo tras la llegada, donde además comentó su valiente planteamiento del día: «Sabía que tenía que intentarlo al pie de la última subida si de verdad quería hacer diferencias. Es casi increíble la sensación de ganar aquí frente a todos estos enormes seguidores. Estoy con muchas ganas de que llegue la crono«, explicaba Roglic.
Roglic, en el podio del Tour de Eslovenia. Foto: Team Lotto NL-Jumbo
El esloveno lleva un año para enmarcar con cinco victorias, todas ellas de un nivel incuestionable. Ganó la Itzulia y también la contrarreloj de la misma, y antes ya se había anotado una etapa en la Tirreno-Adriatico. Poco después se adjudicó el Tour de Romandia, esta vez sin etapas parciales. Si no ocurre nada raro, lo normal es que también acabe ganando la ronda de su país.
Ahora sólo falta saber qué papel tendrá en el Tour de Francia, si irá en busca de etapas o tratando de hacer la general por primera vez en su trayectoria deportiva. El Lotto NL-Jumbo alineará también a Steven Kruijswijk, por lo que en primera instancia el liderazgo del equipo será bicéfalo. Aunque, ciertamente, de momento Roglic llega con una carta de presentación mucho mejor.
