Van Avermaet: “Ganar ayuda a volver a ganar”

Greg Van Avermaet (BMC) ha logrado por fin su primer Monumento a los 31 años, pero lo ha hecho cerrando un ciclo impresionante desde que una caída en Flandes le borrara el año pasado: etapa y liderato en el Tour, Juegos Olímpicos, Montréal, Het Nieuwsblad, Harelbeke, Gante-Wevelgem, y ahora, París-Roubaix

El belga, verdadero dominador de la temporada de clásicas en el momento más dulce de su carrera, ha admitido que no hubiera imaginado poder llegar a ganar la París-Roubaix después de ser el más fuerte en el velódromo: “Al principio de mi carrera, vine al velódromo de Roubaix y pensé que sería imposible para mí ganar aquí diez años después. Y lo he logrado”.

Después de muchos años de combatividad y dar en el poste, muchas veces a la sombra de figuras como el mismo Philippe Gilbert tanto en Lotto como en BMC, por fin le ha llegado su hora. Ha logrado un Monumento por la puerta grande, en la edición más rápida de la historia. Y se siente orgulloso: “He trabajado mucho para esto. Cada año he ido mejorando, y al final he ganado”.

Van Avermaet ha superado en un poderoso sprint a Zdenek Stybar (Quick Step) y Sebastian Langeveld (Cannondale-Drapac), sus dos compañeros de fuga decisiva al entrar al velódromo. “He hecho lo que decía hacer. Tenía confianza en mi sprint, ya que he ganado bastantes en grupos pequeños. Soy de los corredores más rápidos, aunque cuando Stuyven y Moscon han llegado, lo ha cambiado todo”, ha explicado.

Los dos perseguidores han alcanzado al trío ante su extrema vigilancia, pero ha sido entonces cuando Stybar ha acelerado y Van Avermaet ha respondido con un sprint larguísimo de mucho poderío. “No esperábamos que volvieran, pero he tenido la fuerza de superar a Stybar, y estoy muy contento”.

El campeón olímpico, sin embargo, ha empezado la carrera con problemas, pasando en Arenberg con medio minuto perdido a causa de una avería. “Me he mantenido calmado y he tenido un buen equipo a mi lado en el momento adecuado cuando he tenido una avería, así que he logrado enganchar con los mejores sin gastar mucha energía”, ha explicado.

Y también los movimientos tácticos de su compañero Daniel Oss, entrando en cortes incluso en dos ocasiones, han hecho la carrera más fácil para Van Avermaet. “Daniel Oss ha hecho una gran carrera. Ha sido un buen día para nosotros como equipo”, ha admitido.

Desde que una caída en el Tour de Flandes 2016 le dejara sin acabar su campaña de pavé, el belga se ha mostrado prácticamente intratable en sus los últimos meses: etapa y liderato en el Tour de Francia, gran victoria en los Juegos Olímpicos, GP Montréal, Omloop Het Nieuwsblad, GP E3 Harelbeke, Gante-Wevelgem, y ahora, el Infierno del Norte. Sin embargo, a pesar de haberse estrenado en un Monumento, sigue poniendo el triunfo en Río como referencia.

“Mi título olímpico será siempre mi mejor victoria, pero es muy bonito ganar por fin un Monumento. Lo he intentado durante muchos años y he creído que lo podía conseguir. Ganar ayuda a volver a ganar”, ha comentado sobre su racha victoriosa.

París-Roubaix: Van Avermaet por fin es Monumental (Vídeo)