La entrañable historia en el recuerdo de Sergio Higuita

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Foto: Sergio Higuita

El ciclista Sergio Higuita ha tenido en las redes sociales un recuerdo muy entrañable que va más allá de lo deportivo y que merece ser destacado. El corredor de Education First ha recordado su primer viaje internacional y el apoyo que tuvo en aquella experiencia por parte de uno de los auxiliares: Daniel.

Sergio Higuita viajó por primera vez fuera de Colombia hace seis años, en concreto a la Vuelta del Porvenir en Guatemala. El era júnior y así cuenta la experiencia: «Viajábamos con mucha ilusión. Eramos juveniles y ya nos estábamos encaminando en el ciclismo profesional. Aunque todos éramos muy buenos ciclistas, no sabíamos qué nos iba a deparar la vida. La carrera comenzó y en mi primera etapa tuve una lamentable caída que me dejó sin posibilidad de pelear la general. Al día siguiente me embarqué en una fuga, la cual prosperó y pude ganar la etapa«.

Pero esa primera victoria internacional no fue fácil: «En medio de esa etapa tuve la mala fortuna de que pinché mis dos ruedas y el mecánico, Daniel, se bajó como si fuera a pelear por su propia vida con la ilusión de verme ganar. Y lo conseguimos gracias a él, quien me dio ese empujón que dan los mecánicos con fuerza para impulsarnos y me dijo: «¡Tú puedes ganar hoy! ¡Eres un monstruo!» Y ganamos la etapa. También la general con Wilmar Paredes y la clasificación de la montaña con Kevin Cano y las metas volantes con Mateo Uribe. Fue un recuerdo hermoso para mi vida«.

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Higuita, en el centro, felicitado por sus compañeros. Foto: Sergio Higuita

Sin embargo, el momento delicado llegó mucho después: «Hace un año Daniel, ese mecánico y amigo que me ayudó en la vuelta, sufrió un accidente grave de tráfico, que casi acaba con su vida. Allí estábamos la mayoría de sus amigos acompañándolo. Cuando entré en su habitación de la UCI vi que estaba luchando por ganar una etapa más importante que cualquier carrera que exista en este mundo del ciclismo: la de la vida. En ese momento me quedé parado, pasmado por verlo así en silencio y solo le daba aliento y le decía que luchara para ganar esa etapa mirando al cielo y pidiéndole a Dios, dándole todas las fuerzas que tenía mi cuerpo. Con el tiempo, Dani se logró recuperar ¡y ganó la carrera más dura que le ha puesto la vida!».