Carapaz (Movistar), a un segundo del liderato en Ruta del Sur

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Foto: @Movistar_Team

Después de ser tercero en toda una etapa reina de la Route su Sud (2.1, Francia), casi 5000 metros de desnivel y final en Gavernie (1ª categoría) tras superar el Tourmalet, Richard Carapaz (1993, Movistar Team) se quedó a un solo segundo de tomar el liderato

El ecuatoriano entró en meta tercero, con un grupo a 42 segundos del ganador, Pierre Rolland, junto a Gianni Moscon y Rigoberto Urán. Un resultado que le dejó a un solo segundo de tomar el maillot amarillo, que es para Silvan Dillier (BMC) a falta de la etapa final.

“Ha sido una etapa muy difícil, pero me he sentido bien y el equipo ha hecho un gran trabajo para mí en el último puerto. Dani Moreno ha estado magnífico, pero no solamente ha sido él, sino que todos han estado muy cerca de mí”, celebraba Carapaz al acabar la etapa.

Un resultado que le deja satisfecho y que demuestra su nivel creciente y proyección en la temporada de su debut. “Aunque se me haya escapado el liderato en la general por un segundo, estoy satisfecho con mi carrera. Al final ha faltado un poquito, pero lo hemos dado todo”.

“Mañana (por hoy) la etapa parece dedicada a los sprinters y no debería haber movimientos en la general, pero nada está hecho hasta que no se supere la meta final”, apuntaba.

En su primer año de profesional, Carapaz no está decepcionando: fue segundo en marzo en el GP Industria&Artigianato, solamente superado por todo un Adam Yates (Orica-Scott), para luego acabar 4º en la Vuelta aCastilla y León y 6º en la Vuelta a Madrid, además de foguearse en el World Tour en Romandía y Dauphiné.

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Carapaz, solo batido por Yates en Larciano. Foto: Sirotti

“En el Dauphiné tuve un rol de compañero de equipo, y en la Ruta del Sur me lo han devuelto, y eso es muy gratificante. Estoy contento de poder estar en los primeros puestos”, afirma el ecuatoriano, un escalador con buena punta de velocidad que sigue apuntando alto.

El año pasado, Eusebio Unzue pidió que se le diera cobijo en el equipo Lizarte… y vaya si funcionó. Segundo en el Memorial Valenciaga con tan sólo un día de competición, para luego ganar en Urraki, Lazkao o la Vuelta a Navarra. Demostró con creces que su salto a Movistar Team estaba más que merecido, empezando ya como stagiaire a finales de la pasada temporada.

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