Nico Sessler (Burgos-BH), un ciclista en el epicentro del coronavirus

La ola del coronavirus ha ido extendiéndose desde China hasta Europa y desde Europa hasta América. Ahora mismo, Brasil es el país número úno en el triste ranking mundial de fallecimientos diarios. Y allí vive un ciclista profesional del equipo Burgos-BH: Nicolas Sessler. Nadie mejor que él para contarnos cómo está viviendo el momento más dramático en la crisis del COVID-19 dentro de su país.

La primera pregunta parece obligada: ¿cómo te encuentras?

Muy bien, la verdad. Viví la crisis del coronavirus en España y eso me sirvió de entrenamiento, por así decirlo. Justo antes del estado de alarma, decidí regresar a Brasil y comencé aquíun período de cuarentena voluntaria. Vivía en casa con mi familia, pero con mucho cuidado de no compartir espacios cerrados con ellos y de cuidar al máximo mi higiene personal hasta que pudiéramos garantizar que no había llegado con el COVID-19. No era obligatorio, pero sí que quisimos hacerlo por máxima precaución. Al ver que no tenía ningún síntoma después de dos semanas, empezamos ya a hacer una vida más normal dentro de casa, pero con las mismas precauciones a la hora de salir a la calle.

¿Viste mucha concienciación en Brasil?

Sinceramente, no. Yo venía de España y tenía muy clara la gravedad de la situación. Pero en Brasil no había ese grado de precaución, ni mucho menos. Con el tiempo, como es lógico, ha habido mucha más concienciación social en mi país.

Y ahora, con más de 1.400 muertos en un día, ¿vives con mucha preocupación?

Por supuesto. No voy a relativizar el tema porque es muy grave y quiero mandar las condolencias a todas las familias de los fallecidos. Pero sí quiero que se entienda bien en Europa que Brasil es un país que tiene la misma población que Alemania, España, Italia y Bélgica juntas. Las cifras de fallecimiento son dramáticas y cada muerto tiene detrás una historia muy dura. Así que máximo respeto. Pero también es bueno ponerlo todo en su contexto. En mi caso, además, tengo la suerte de que vivo en una región que desde el principio ha estado muy alejada del foco del problema. En mi provincia, por así decirlo, ha habido muchísimos menos casos de contagio y fallecimientos, aunque repito que toda protección es poca.

¿Has podido entrenar?

Sí, en Brasil no se ha hecho un confinamiento como en Europa. Pero he tomado precauciones: salir siempre solo, no pararme en mitad de ningún entrenamiento a tomar café… En ese sentido, he tenido la suerte de no perder ni un día de entrenamiento. Me he centrado al principio en entrenar por mantenimiento y por puro placer, nada más, puesto que no teníamos nada claro cuándo íbamos a poder volver a las competiciones. Ahora he empezado a incrementar el ritmo de los entrenamientos y, además, he ido a otra zona más montañosa para mejorar mi nivel y cambiar la dinámica habitual. Pero siempre porque tengo la ventaja de que en mi región no hay grandes problemas sanitarios como sí está pasando en otras zonas de Brasil.

¿Y cuándo el regreso a Europa?

Pues eso depende sobre todo de las autoridades políticas más que del equipo o de mí. Tenemos que ver cuándo vuelven las competiciones y cuándo podemos entrar en España. Lo normal es hacer un test para demostrar que no tengo ningún problema antes de viajar y luego pasar un período de un par de semanas de aislamiento voluntario en España, aunque sea entrenando en solitario, pero sin convivir con nadie ni en entrenamientos ni en el día. Eso lo tenemos garantizado porque en España tengo una casa, así que no significará ningún problema.

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