Movilidad urbana: Un intermitente para casco sin usar las manos

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Foto: Elisava

La startup barcelonesa Ticc* ha creado un dispositivo de luces intermitentes para casco que mejora la seguridad de los usuarios de bicicletas y patinetes eléctricos.

Ticc* es un dispositivo de luces intermitentes que se adapta a cualquier tipo de casco. Su innovador sistema de sensores de movimiento permite que el usuario pueda indicar al resto de usuarios de la vía pública la dirección que tomará con un ligero movimiento de cabeza a izquierda o derecha, sin retirar las manos del manillar. Su sistema de luces LED aseguran visibilidad día y noche a más de 400 metros.

Para aumentar la seguridad, el aparato dispone de un sistema de altavoces conectados a la luz que informa al usuario cuando el intermitente se ha activado. Además, su sistema hermético lo hace resistente al agua y a cualquier adversidad climatológica.

Ticc* nace de la voluntad de un grupo de cuatro jóvenes emprendedores (Sergi Paez, sabadellense, y los barceloneses Guillem Crosas, Jordi Planas y Barbara Montoto) que quieren impulsar el cambio hacia una movilidad sostenible y segura en las ciudades. Un grupo de amigos de ámbito académico y profesional diverso que ha trabajado conjuntamente para crear una nueva manera de moverse, más segura, más sostenible y de diseño.

La empresa catalana quiere promover y mejorar la movilidad segura y sostenible de los usuarios con su innovador sistema de luces para casco. Sergi Paez, cofundador del proyecto, y estudiante del Grado de Ingeniería en Diseño Industrial en Elisava explica: «Si tal y como se prevé, la bicicleta y el patinete se convierten en uno de los ejes centrales de la movilidad de las ciudades del futuro, queremos ser un actor clave para asegurarnos de que este incremento de usuarios en la vía pública se haga de la manera más segura para todos«.

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Foto: Elisava

Con el objetivo de comenzar la producción del dispositivo han realizado una campaña de micromecenazgo en la plataforma kickstarter que ya ha superado su objetivo de recaudación en un 120% durante los primeros días de campaña. El diseño y desarrollo de la campaña ha contado con el asesoramiento y acompañamiento de los expertos de Elisava, Escuela de Diseño e Ingeniería de Barcelona, como proyecto seleccionado del crowdfounding challenge. La campaña sigue activa y los usuarios pueden obtener una unidad o hacer aportaciones para contribuir a la producción del producto.

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