Mathieu van der Poel, luces y sombras en su debut en el mountain bike

Si algún aficionado al ciclismo abre la página de los resultados de la última cita de la Copa del Mundo de mountain bike, podrá comprobar que Mathieu van der Poel no ha ganado su primera carrera. En realidad, sólo fue sexto en el circuito de Les Gets. Pero el resultado no lo es todo… y, por tanto, hay muchos motivos para el optimismo.

Mathieu van der Poel tiene en el campeonato del Mundo de mountain bike su gran objetivo en la segunda parte del año. Para quitarse esa espina personal que sigue teniendo clavada con la especialidad de las ruedas gordas, Van der Poel necesita mejorar su técnica, conseguir unas mejores sensaciones tras los últimos fiascos y, además, sumar puntos UCI para poder salir en una posición medianamente digna.

En la salida de Les Gets, Van der Poel salió bastante retrasado y muy pronto pasó a rodar en el puesto 50. Parecía que no había opción para la alegría, pero el de Alpecin comenzó una remontada sencillamente espectacular, sobre todo en los tramos más exigentes. A partir de ahí vimos que cedía terreno respecto de los mejores en las bajadas más llanas, pero los compensaba en las subidas… hasta que en las dos últimas vueltas fue a menos y acabó cediendo un minuto sobre Luca Martin después de una remontada impresionante, pero que dejó sus secuelas.

La conclusión es obvia: tiene piernas para ser campeón mundial, pero necesita mejorar su confianza en las zonas técnicas y colocarse en cabeza sin gastar tantas energías.