La Vuelta a España de 2026, desde Mónaco hasta Granada

La Vuelta a España de 2026, desde Mónaco hasta Granada

La Vuelta a España de 2026 será muy especial. La carrera viaja por cuatro países y podemos afirmar que es una prueba casi totalmente mediterránea, puesto que obligará a los corredores a desplazarse desde Mónaco hasta Granada, con pasos por Francia y Andorra y con diez etapas finales en Andalucía.

La Vuelta había desvelado que Mónaco acogerá la salida oficial. Ahora se conocen todos los detalles de una edición histórica, puesto que Granada se convierte en la octava ciudad que coronará al ganador final, uniéndose a Madrid, Bilbao, San Sebastián, Miranda de Ebro, Salamanca, Jerez de la Frontera y Santiago de Compostela. Desde 1986, la carrera había terminado siempre en Madrid o en Santiago de Compostela.

«La Vuelta 26 seguirá manteniendo el carácter internacional del evento», afirmó el director general Javier Guillén. «Será una edición con un marcado carácter mediterráneo, desde su inicio hasta el final en Andalucía. Mónaco marcará un arranque prestigioso para una edición que visitará ciudades históricas, puertos de montaña que forman parte de nuestra historia y ascensiones inéditas, antes de finalizar en un enclave único como la Alhambra, la fortaleza roja de Granada».

Como ya ocurrió en 2025 tras el inicio de la carrera en Piamonte (Italia), Francia servirá de enlace entre la salida y la Península Ibérica, con un final apto para velocistas y corredores explosivos en Manosque y una llegada en alto más exigente en Font-Romeu. La entrada en los Pirineos anuncia una concentración de montaña en el otro principado, Andorra, que aparece en el recorrido de La Vuelta por 25ª vez (desde 1965) y ofrecerá una secuencia de Port d’Envalira, Beixalis, Coll d’Ordino y Alto de la Comella en apenas 104 kilómetros, íntegramente dentro de su territorio.

Esto permite al arquitecto del recorrido, Fernando Escartín, trazar el panorama general y advertir a los corredores: «¡Es un recorrido muy duro! La montaña tendrá un papel protagonista en una de las ediciones más difíciles de la historia de La Vuelta. Andorra marcará el tono al inicio de la carrera con una etapa corta pero muy exigente, antes de afrontar ascensiones como Valdelinares, Aitana, Calar Alto, La Pandera, Peñas Blancas y el inédito Collado del Alguacil, en una última jornada de alta montaña que promete ser extremadamente dura. Además, habrá varias etapas de media montaña que seguro nos ofrecerán un gran espectáculo».

En su mayor parte, se trata de regresos a finales en alto ya conocidos. Valdelinares no acogía La Vuelta desde la fiesta colombiana de 2014, cuando Winner Anacona se llevó la victoria de etapa y Nairo Quintana se convirtió en nuevo líder de la carrera. El último corredor en imponerse en el Alto de Aitana fue el francés Pierre Latour en 2016. Su sucesor deberá sacar el máximo partido a más de 5.000 metros de desnivel positivo. Quien gane en Calar Alto habrá ascendido previamente el Alto de Velefique, como hizo el colombiano Miguel Ángel López, vencedor en el observatorio de la provincia de Almería en 2017. La Sierra de la Pandera está más fresca en la memoria gracias al triunfo del ecuatoriano Richard Carapaz en 2022, año en el que también fue el primero en llegar a Peñas Blancas.

Dos nuevos desafíos esperan al pelotón: un tramo de 3,5 km de camino de tierrahacia el El Bartolo, situado a 16 km de la línea de meta de la etapa 6 en Castellón, y el Collado del Alguacil, la última subida y ni mucho menos la menos exigente, ya que sus más de ocho kilómetros presentan rampas especialmente duras, con pendientes de hasta el 20 %. El final de la etapa 20 será una ascensión inédita en La Vuelta, que pondrá el broche a una jornada marcada en Sierra Nevada por el doble paso por el Alto de Hazallanas.

Mientras los especialistas contra el reloj disfrutarán de una etapa más larga que en los últimos años, con 32,5 km de terreno bastante llano entre El Puerto de Santa María y Jerez de la Frontera, además de los 9 km en Mónaco el primer día, los velocistas dispondrán de cuatro o cinco etapas para lucirse, compartiendo oportunidades con los corredores explosivos, incluso en la última jornada, ya que la meta en la Alhambra de Granada se sitúa en lo alto de una subida de alrededor de un kilómetro, en un espectacular circuito al que se dará cuatro vueltas. Así se pondrá punto final a tres semanas de competición en un entorno incomparable, auténtico meca de la cultura y la historia.