La nueva vida de Ezequiel Mosquera

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Foto: Miguel del Mortirolo

Ya hace casi una década que el gallego Ezequiel Mosquera dejó de ser ciclista profesional. Cuando dejó la bici, un deporte que considera «muy absorbente», canalizó toda la energía que le dejaba el ciclismo para seguir vinculado al ciclismo pero de un modo distinto.

Así creó Emesport en 2013, una empresa que se dedica a hacer servicios a organizaciones de eventos: «El ciclismo es un deporte que te absorbe tanto que tienes que mantenerte activo. Cuando paras, ese parón viene de golpe y tienes que afrontarlo. Hay gente que compite hasta pasados los 40, cosa que a mí nunca se me pasó por la cabeza. Pero empecé a canalizar la energía en otras cosas. Siempre me gustó el mundo de la enología, quisimos montar una bodega con una denominación de origen de aquí de Galicia. Pero era un mundo desconocido para mí», explica sobre el proceso de creación de su empresa.

Un proceso que le llevó, tras esa incursión en el mundo del vino, a volver a lo que conocía: «Vi que en Galicia había eventos, se organizaban carreras y había iniciativa, pero no tenían nadie que les pusiera una infraestructura aquí y tenían que buscarlo fuera. Ahí vino la idea de Emesport», dice Mosquera, que no obstante no se detuvo ahí.

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Y es que decidió ampliar su modelo, el del ciclismo, a otros deportes: «Tuve y tengo clarísimo que en el ciclismo, las vueltas por etapas a las que puedes acceder tienen tanto trabajo que bastante tienen con sacarlas adelante. Tampoco puedes pensar en subsistir únicamente con ciclismo. Decidimos canalizar ese producto hacia otros deportes, el chip de cronometraje, el running… trabajar más con otras instituciones y tener unos clientes seguros en unos servicios que las carreras populares valoran muchísimo, y el ciclismo lo tenemos para matar el gusanillo y hacer unas puestas en escena bonitas que es lo que nos gusta».

De hecho, a día de hoy, Emesport presta servicio a un total de 180 eventos durante todo el año, no todos ellos de ciclismo, pero entre otros la Vuelta a Murcia que se celebra este fin de semana, la Ourense Strade Termal de abril o la Gran Fondo Costa de Almería y la Epic Race de Pontevedra. Además, el nacimiento no fue cosa fácil: «Coincidió en 2013 con el peor momento económico del país. Nos llamaban de locos para arriba, pero también era un momento en el que empezó la eclosión del deporte popular».

Por si fuera poco o no tuviera bastante, Mosquera también ha creado una firma de ropa deportiva de alta calidad, Northboard, en la que el modelo pasa por hacer un producto de alta calidad aunque sin una producción masiva: «Sabemos que es un mundo muy competitivo y con una guerra de precios enorme, así que de primeras hemos decidido no entrar. Tenemos una línea de alta calidad, para poder abrirte hueco necesitas un producto muy bien hecho. Si entrar en guerra de precios eres hombre muerto antes de salir al ruedo», reflexiona el gallego.

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Foto: Miguel del Mortirolo

Y porque el tiempo no le da para más. Pero las ideas siguen dándole vueltas en la cabeza: «Ideas tengo muchas, lo que falta es tiempo. Siempre maquinas proyectos, siempre tienes ganas de hacer más cosas. Me hubiese gustado organizar algún evento más como hacemos con el Gran Fondo de Ézaro, pero al final tienes que poner en la balanza cómo apañarlas para hacerlo, dejar de lado otras cosas y que compense. Trabajar prestando servicios es duro, pero es A,B,C. Organizar limita más. Los grandes organizadores hacen una, dos, tres pruebas al año. Tenemos que tener claro a lo que hemos venido».

Después de varios años, Mosquera puede decir que ha establecido su vida fuera del ciclismo profesional. Pero también tiene clara la reflexión y perspectiva que le deja su paso por este deporte a la hora de dejarlo y buscar una vida fuera: «El ciclismo te absorbe mucho y al final la vida, los codazos que no te llevas a los 20 te los vas a llevar a los 35 o 40. A esas edades los codazos se encajan peor y tienes que llevarlos igualmente. Es una fase complicada. En el ciclismo tenemos un problema, te exige centrarte al 100% en él. También es cierto que la capacidad de trabajo que te deja, canalizada en otro lado, acaba dando resultado», concluye.

La Gran Fondo Ézaro, en cuya organización participa, será el tema central de la segunda parte de la entrevista a Ezequiel Mosquera