La Guerra Civil que acabó con el futuro del equipo Delko

El equipo Delko no seguirá en las carreteras en 2022. Es más, la formación francesa de nivel ProTeam ni siquiera podrá acabar con normalidad la temporada, puesto que ha suspendido todas sus actividades y es más que probable que su destino sea el de gestionar una bancarrota anunciada. ¿Qué hay detrás de todo lo sucedido en los últimos meses? Es sencillo responder: una guerra civil.

El equipo francés Delko siempre estuvo marcado por una inestabilidad económica que le impedía ser uno de los grandes en Francia. Mientras equipos como Cofidis, Arkea e incluso B&B lograban todos los años invitaciones importantes de manos de ASO, la escuadra Delko nunca estaba entre los candidatos al Tour de Francia. En su caso se debía limitar a una invitación a la París-Niza y a la París-Roubaix, lo que tampoco les permitía ser un equipo atractivo para las grandes marcas.

Delko, una cadena de reparación de coches, se unió al proyecto como patrocinador principal y después de un tiempo de relación fluida comenzaron los problemas entre Frederic Rostaing y Philippe Lannes. El primero era el manager general del equipo y el hombre que lo había llevado desde la categoría amateur hasta la profesional. El seguro era el propietario de Delko y principal patrocinador. En un momento dado, Lannes quiso asumir el mano del día a día del equipo. Y Rostaing quedó apartado.

A partir de ahí el equipo perdió varios copatrocinadores: Nippo se marchó a EF con Jonathan Vaughters, especialista en la búsqueda de patrocinios de esta índole. Y los patrocinadores públicos -la ciudad, la región…- también se marcharon para apoyar a un pequeño equipo continental. Delko tenía que hacerse cargo de todos los gastos y eso fue demasiado para Lannes. A partir de mayo se vio que iniciaba un proceso de reestructuración. Paso a paso iban saliendo auxiliares e incluso ciclistas para recortar gastos. Y lo curioso es que el equipo cosechaba buenos resultados en las carreteras. Pero los números no salían. Y el final ha sido el más dramático: suspensión de actividad y desaparición para 2022. Tres son los ciclistas españoles afectados: José Manuel Díaz, ganador del Tour de Turquía, Delio Fernández y Eduard Prades.