De la Cruz: «El Giro con Froome fue como una universidad»

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Foto: David Ramos/Getty Images / Prensa David de la Cruz

David De la Cruz (Sabadell, 1989) afronta su gran objetivo de la temporada: la Vuelta a España. La carrera que ha preparado específicamente para ser el jefe de filas del Team Sky, que además este año ha ganado las dos grandes disputadas ya hasta la fecha. Cierto que el catalán no es el máximo favorito, pero sí es de esos ciclistas que tienen la carrera como objetivo desde enero.

De hecho, por primera vez, la preparación «ha ido como había planeado» y asegura que ha entrenado «mejor que otros años» antes de tomar la salida en Málaga. Esta vez sin contratiempos como la neumonía del año pasado o la apendicitis del anterior. La intención no es otra que «disfrutar del trabajo hecho», y el tercer puesto en la Vuelta a Burgos le confirman que va por buen camino.

Precisamente sobre su papel en Sky, un equipo que ha ganado Giro y Tour, no le supone una presión extra, sino más bien «una oportunidad» y la ilusión de «un reto bonito» por liderar un equipo tan potente. Aunque deja claro que su objetivo inicial no es ganar la Vuelta: «Froome es quien es, y Thomas ganó sin haber sido antes Top10, pero no voy con ese objetivo. Hay corredores que deben llevar más el peso de la carrera», explica.

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De la Cruz bate a Omar Fraile en el sprint de la París-Niza. Foto: Team Sky

Sobre un objetivo concreto, también es sincero. No piensa en ello ni tiene establecida una posición. «El ciclismo es un deporte impredecible», señala, pero sí tiene claro que se ha «entrenado mejor y sacrificado más» que en ninguna otra ocasión. En cualquier caso ya tiene un séptimo en la general -2016- y una etapa.

En cuanto al recorrido, lo define como «más progresivo en la dureza» que en años anteriores y considera que habrá dos fases: una primera mitad para «no perder la carrera» y otra segunda para «tratar de ganarla», ya que los «segundos que se pierdan al principio» se pueden transformar en minutos al final.

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Foto: Team Sky

Por otra parte, aunque ha entrenado para la Vuelta de forma específica, tampoco le quita ojo al Mundial de Innsbruck, ya que es el primero «para mis características». El corredor catalán confía en estar porque lo tiene «entre ceja y ceja, ya que Catar y Noruega no me favorecían«. De ahí la ambición por volver a formar parte del equipo de Javier Mínguez.

Finalmente, De la Cruz hace balance de la temporada con las dos victorias en Andalucía y París-Niza, y sobre todo del Giro que corrió junto a Froome, que define como «una universidad». Y es que el catalán aprendió en la ronda italiana de su jefe de filas, sobre todo, a dar la vuelta a la adversidad: «Afrontó muy bien los malos momentos», comenta, especialmente cuando la carrera se le puso en contra. «Tenía todas las adversidades, había corredores superiores y aún así le dio la vuelta a la carrera. Aprendí mucho para el futuro. No hay muchos en el pelotón que sepan afrontar los malos momentos como él«, concluye.