Froome: «No podía esperar al último puerto”

Chris Froome (Team Sky) era el cuarto clasificado del Giro d’Italia antes de la etapa reina, con prácticamente cuatro minutos perdidos. Sin embargo, el británico ha cumplido con su palabra de “competidor” y ha provado de dar un vuelvo a la carrera atacando a 80 kilómetros de meta con tres puertos por delante… con éxito.

“Creo que nunca en mi carrera había atacado a 80 kilómetros de meta, corriendo a mi ritmo y llegando a meta”, ha dicho el británico nada más cruzar la meta en la etapa más espectacular de su carrera, que va camino de la victoria del Giro después de lograrlo cuatro veces en el Tour de Francia y también en la última Vuelta a España.

Froome ha arrancado en el icónico Colle delle Finestre, con el líder Simon Yates ya cortado (ha acabado cediendo 38 minutos) tras una gran selección de sus compañeros. “El equipo ha hecho un trabajo enorme para prepararme el terreno. Primero teníamos que cortar a Simon Yates y luego escaparnos de Tom Dumoulin. Para pasar de cuarto a primero, no podía esperar al último puerto”, ha afirmado.

La exhibición ha sido brutal, tanto por el rendimiento deportivo como por lo histórico del recorrido, con las subidas a Finestre, Sestrière y el final en Jafferau-Bardonecchia. “Colle delle Finestre era el lugar perfecto para hacerlo. Las carreteras de tierra me recuerdas un poco a las de África. Me sentía bien y pensé que era ahora o nunca, tenía que probarlo”.

Antes del final, al Giro le queda mañana otra gran etapa de montaña, encadenando los puertos de Tsecole, San Pantaleon y Cervinia, con Tom Dumoulin (Team Sunweb) pisándole los talones a 40 segundos en la general. “Mañana queda otro día muy duro, pero las piernas están bien y me he ido sintiendo mejor y mejor a medida que la carrera avanzaba. Aunque hoy lo he dado todo, he intentado mantenerme en mi límite para poder rematar mañana”, ha apuntado la nueva maglia rosa.

Giro Italia: Froome da un vuelco histórico al Giro (Vídeo)