El éxito de Michael Woods también es el de Sylvan Adams

El éxito de Michael Woods también es el de Sylvan Adams

El ciclismo mundial fijó sus ojos sobre Michael Woods, brillante triunfador en la cima del Puy de Dome. A partir de ahí, se han repetido las historias de un atleta que sufrió una lesión y al que le recomendaron que empezase a montar en bicicleta para recuperarse con celeridad pero sin perder su estado de forma. Esa rehabilitación le gustó tanto que ha acabado siendo una estrella mundial. Pero su éxito también es el de Sylvan Adams.

El ex ciclista Ran Margaliot soñó con tener un equipo israelí en el Tour de Francia. Ese sueño acabó encontrando el respaldo de dos empresarios: Ron Baron y Sylvan Adams. En el caso de Adams, su implicación es total. Hablamos de un hombre enamorado del ciclismo y que está dispuesto a invertir una parte de su patrimonio en la construcción de un equipo que rinde homenaje a sus dos países: Canadá e Israel.

Adams tuvo la audacia de adquirir la licencia de Katusha pero eso le llevó a una elite para la que el equipo Israel tal vez no estaba preparado. Y menos si por el medio se cruza una pandemia y muchos ciclistas enfermos. Estos últimos años de Israel, difíciles en todos los sentidos, acabaron llevando al equipo a la categoría ProTeam. Para muchos podría haber significado un momento de parar, olvidar la inversión en ciclismo y pensar en otro «juguete». Pero Sylvan Adams hizo justo lo contrario: reafirmo su apoyo al equipo y apostó por una mayor profesionalización en la estructura.

Los resultados vienen dándole la razón. La victoria de Woods en el Tour no es sino la guinda a un equipo consolidado entre los 15 mejores del mundo y que en 2024 no tendrá ningún tipo de problema para correr Tour, Giro, Vuelta y todas las grandes clásicas. Lo están ganando en la carretera gracias al esfuerzo de ciclistas como Woods… pero también gracias a la ilusión de un Sylvan Adams que nunca dejó de creer en su equipo.

FOTO: @IsraelPremTech