Ane Santesteban: «El Giro es el gran objetivo del año»

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Foto: WNT-Rotor Pro Cycling

Ane Santesteban (1990, WNT-Rotor Pro Cycling) afronta con la máxima ilusión el Giro d’Italia Internazionale Femminile, el Giro Rosa, que comienza el viernes. La escaladora guipuzcoana afronta el reto de superar el noveno puesto del año pasado y ser protagonista en una carrera que concentra al mejor pelotón mundial. Sin duda, es el «Tour de Francia» femenino.

Para Santesteban será su séptima participación: 2010 (54ª), 2013 (68ª), 2014 (24ª), 2016 (24ª), 2017 (20ª) y 2018 (9ª). Su evolución es evidente y aspira a subir un escalón más en 2019. Sus últimos resultados invitan al optimismo, octava en la Emakumeen Bira, cuarta en el GP Plumelec y 12ª en el OVO Energy Women’s Tour. Y su aproximación ha sido ideal en Manzaneda (Ourense), concentrada a 1.800 metros de altura las dos últimas semanas.

¿Qué supone disputar el Giro de Italia?
Es el gran objetivo del año. Es la vuelta por etapas más importante del calendario internacional; es el Giro de Italia. Es todo especial y la verdad es el objetivo que me había puesto con el equipo. Espero que vaya todo bien. Tengo recuerdos muy buenos. No sé decir por qué pero se vive de una manera diferente. Es una carrera a la que le tengo mucho cariño y más desde el año pasado que disfruté y se me dio bastante bien.

Y llega con los deberes hechos.
Desde luego. En las últimas carreras me he visto mejor, he encontrado mis sensaciones, mis piernas, y en estas últimas semanas en altura he hecho el trabajo lo mejor que he podido. He entrenado muy duro, también he descansado, y me he cuidado lo máximo posible. Son los valores de disciplina, esfuerzo, superación, pasión, compromiso, responsabilidad y cercanía que impulsa el patrocinador del equipo Ceratizit Group y Ceratizit Ibérica en España. Si entrenas muchísimo y a tope, no va a ningún sitio. Tienes que recuperar, desconectar, descansar y asimilar todo el trabajo hecho. Y podrás entrenar más y mejor.

Sus últimos resultados le avalan también.
A pesar de los problemas de principio de temporada, pienso que he ido subiendo de nivel y en las últimas carreras he demostrado que estoy ahí arriba. Todo ha ido perfecto en la preparación las últimas semanas. En Manzaneda, no he tenido ningún problema, la espalda no me ha dado guerra, y he podido entrenar perfectamente. Ahora solo falta asimilar todo el trabajo y tener buena suerte.

¿El reto es superar su actuación del año pasado?
Sí (rotundo). El año pasado fui novena; perdimos mucho tiempo en la contrarreloj por equipos y en otra etapa se me escapó bastante tiempo por una caída cerca de meta. Eso me penalizó en la general. La verdad es que estoy con ganas y me gustaría intentar mejorar lo del año pasado, aunque sé que es bastante difícil siendo realista.

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Foto: WNT-Rotor Pro Cycling

¿Y hasta dónde cree que puede llegar?
(Se lo piensa). El quinto-sexto puesto es algo que se puede conseguir. Tiene que ir todo muy bien. En diez etapas pueden pasar muchas cosas, incluso un mal día, aparte de caídas, lesiones o un problema mecánico. Es una vuelta muy larga, sin descanso, y puede pasar de todo.

El WNT-Rotor Pro Cycling llega pletórico pues lleva una temporada espectacular.
Sí. Desde principios del año empezamos a ganar. Yo creo que estamos superando todas las expectativas. Estamos todas muy motivadas y ese ambiente y ese rendimiento se contagia y afrontamos con ganas el Giro. Desde luego que me encantaría dar continuidad a esa línea y recompensar el apoyo y el patrocinio de Ceratizit Group y Ceratizit Ibérica.

¿Será la referencia para la clasificación general en su equipo?
Veremos cómo va la carrera. En principio estaremos Erica Magnaldi y yo para la general. Y al final son diez días, pueden pasar muchas cosas. Habrá que ir etapa a etapa. Nunca se sabe. Puedes ir cambiando de objetivo.

¿Cuáles serán las claves del recorrido del Giro 2019?
Quizá es el Giro más duro que hemos hecho ahora. Empieza con una contrarreloj por equipos. A pesar de que todos los días hay mucha dureza, yo creo que la clave será en la quinta etapa que termina en el Gavia, a 2.600 metros, y también la contrarreloj individual del día siguiente.

¿A que tiene más miedo, al Gavia o a las contrarreloj?
Al Gavia le tengo respeto porque no estamos acostumbradas a correr a esa altura y a un puerto tan largo de esas características. Sí que hemos hecho el Zoncolan el año pasado, o algún otro año Mortirolo, Stelvio… Pero siempre asusta. A lo que más miedo tengo, sin embargo, es a las contrarreloj. Porque si estoy en forma sé que suelo rendir en la montaña. Viendo el perfil de la crono de este año, parece que es para arriba y eso me puede ayudar. El año pasado fue una cronoescalada y no perdí nada, incluso adelanté posiciones. Hay muy pocas cronos durante el año. Y para una corredora que no es contrarrelojista y siempre ha sufrido tanto como yo simplemente desde que me levanto todo es diferente. Son los días más difíciles.

En cuanto a la participación, estarán las mejoras del mundo.
Yo creo que todo el mundo se marca el Giro como objetivo. No va a faltar nadie. Van Vleuten va a ser la rival más dura, ya lo demostró el año pasado, dos o tres puntos por encima del resto. Este año todo apunta a que puede repetir.