BMC: La fórmula del éxito en la crono por equipos

Detrás de cualquier éxito hay un trabajo que muchas veces no se ve como debería. Pero si además hablamos de una modalidad tan compleja como la contrarreloj por equipos, esta afirmación cobra aún más sentido. Y si hay un equipo al que se pueda identificar con esta disciplina tan especial y complicada, es sin duda el BMC.

El conjunto rojinegro ha ganado ya dos cronos colectivas en este 2018. La de Tirreno-Adriatico hace ahora dos semanas y la de la Comunitat Valenciana, cuyos tiempos no contaron para la general por las malas condiciones del tiempo. Si remontamos la vista atrás, la última temporada en la que el conjunto estadounidense con vínculos suizos no ganó ninguna fue 2011. Nada que ver con el equipo que es ahora y cómo las trabaja.

Precisamente un veterano como Fran Ventoso, llegado a la estructura en 2017, ha relatado a Zikloland la pormenorizada tarea que hay detrás de una contrarreloj por equipos. El ciclista de Reinosa fue parte de la alineación que ganó la primera etapa de la Vuelta a España en Nîmes, y resume en una frase la tarea que hay detrás de esta modalidad: “Hay gente encargada de analizarlo todo al detalle”, manifiesta.

El equipo BMC, en plena acción durante la crono de Tirreno. Foto: RCS

Y cuando se dice todo, se quiere decir todo. Recorridos, detalles técnicos, decisiones sobre los relevos, duración de los mismos… no se deja nada al azar si se quiere ganar una etapa de esta especialidad: “Hay personas que analizan el recorrido en profundidad para marcar la estrategia a seguir. Nosotros también visualizamos los recorridos antes”, comenta Ventoso.

¿Mucho antes? Pues, desde luego, no es tarea de un par de días: “A mí ya me ha llegado un vídeo, en marzo, de la crono por equipos que haremos en el Tour de California, que será en mayo. Esto puede dar una idea de hasta qué punto está todo medido”.

Antes de salir también hay trabajo, una vez están visualizados los recorridos toca interiorizarlos: “A nosotros nos lo plasman todo en vídeo y en papel. Hay dos o tres personas encargadas siempre de esta modalidad. Ven el recorrido, analizan el viento, las posible variables…  nos dicen quién tiene que estar en cada momento, cómo y de qué manera”, comenta Ventoso.

El BMC Racing Team, ganador en Nimes. Foto: Tim de Waele/BMC Racing Team

Acostumbrado a otros equipos en su larga trayectoria, a Ventoso hubo algo que le llamó especialmente la atención: “Nos dijeron que teníamos que cuidarnos mucho entre nosotros. No puede morir ninguno en los relevos, tienen que ser suficientes para dar el máximo pero quitarte en el momento justo antes de entrar en crisis. Luego depende de lo técnico que sea el recorrido. Por ejemplo en la de la Vuelta, en Nîmes, había muchas zonas técnicas. Salíamos nueve y nos dijeron que en un punto concreto teníamos que ser ya menos porque si no, nos íbamos a estorbar. Todos esos detalles cuentan”, manifiesta.

La contrarreloj por equipos, además, se está convirtiendo en una modalidad cada vez más importante, pues en el ciclismo actual las diferencias tienden a reducirse por el control y trabajarlas bien es una forma de marcar distancias: “Aún hoy hay quien piensa que la crono por equipos somos todos a tope hasta meta, y en realidad no se trata de eso. Es la modalidad en la que más se sufre, porque no vas a tu ritmo sino al de tus compañeros. Aportas a una causa de todos. Y en Tirreno, la gente que perdió tiempo en la CRE se dejó las opciones en la general. Para optar a una vuelta de una semana con crono por equipos, o la trabajas específicamente o lo tendrás muy complicado, pero la gente conoce los recorridos con meses de antelación y sabe a lo que va”, culmina Ventoso.

Con Team Sky, Quick Step y, en los últimos tiempos, Sunweb como grandes rivales, de momento BMC está en lo más alto de las cronos colectivas. Y desde luego queda más que comprobado que no es una circunstancia fruto de la casualidad.