Yves Lampaert (1991, Deceuninck-QuickStep) no ve el día en volver a competir. Entretanto, se sube al tractor para arar las tierras de sus padres, sin olvidarse de los entrenamientos naturalmente.
En este 2020, a Lampaert le dio tiempo ser segundo en el Omloop Het Nieuwsblad. Sin duda, es uno de los fijos en las clásicas de los adoquines del Deceuninck-QuickStep, tercero el año pasado en la París-Roubaix que ganó su compañero Philippe Gilbert o ganador de dos ediciones de la Dwars door Vlaanderen. «Es realmente extraño no tener ninguna carrera. La última vez que puse un dorsal fue en la séptima etapa de la París-Niza y parece que fue hace mucho tiempo. Ahora tenemos un calendario, sabemos a qué apuntar, y eso es realmente alentador, pero cuando lo piensas, todavía queda un largo camino por recorrer hasta agosto, cuando se reanuden finalmente las carreras», afirma.
Aburrir no se aburre Lampaert. «No me puedo quejar de no tener nada que hacer. Dos días a la semana trabajo con el tractor en la granja de mis padres. Aro mucho para preparar el campo para la siembra. Cultivamos coliflor, patata, puerro, calabacín, así que hay mucho que hacer, pero me encanta cada segundo que pasamos allí», destaca.
Dwars door Vlaanderen 2018:
Ahora, no se olvida cuál es su trabajo: pedalear. «No hace falta decir que no descuido el entrenamiento, hago muchos kilómetros. Por ejemplo, el otro día recorrí 200 kilómetros con mi compañero de equipo de Deceuninck-Quick-Step, Bert Van Lerberghe, y fue realmente genial pedalear y tener esa sensación nuevamente, lo extrañamos mucho. También entreno junto con mi novia, Astrid; recientemente compré una Specialized nueva y nos gusta salir a dar un paseo al menos una vez por semana», explica.
Por último, descubre sus otros entretenimientos. «Cuando se trata de relajarse por la noche, estoy en Netflix o en mi portátil, jugando. Estoy viendo «The Last Dance» y es absolutamente apasionante. Me gusta ver documentales deportivos y este puede ser el mejor que he visto, es impresionante. En cuanto a los juegos, sigo siendo bueno en Age of Empires ll. Por el momento, tengo dos civilizaciones favoritas, la vietnamita y la española, y son las que uso para desafiar a Tim Declercq», bromea.
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