Greg Van Avermaet es un fijo en la Clásica de San Sebastián. El gran hombre de carreras de un día del BMC -que seguirá ligado a la estructura de Jim Ochowitz con su nueva denominación-, regresa a la cita donostiarra con la intención de ganar la prueba.
«Siempre disfruto de volver a la Clásica de San Sebastián«, afirma el belga, que en 2015 iba en cabeza y camino a la victoria cuando se vio envuelto en un incidente con una moto de carrera. Su mejor clasificación, pues, es el segundo puesto que logró en 2011.
Alaphilippe, celebrando la victoria en Huy. Foto: ASO
Ahora llega del Tour, donde ha lucido el maillot amarillo durante una semana: «Es una de las carreras de un día más duras de todo el calendario y que, por tanto, me viene bien. Vengo del Tour de Francia en buena forma y siempre suelo estar en el Top10, así que espero volver a tener una buena carrera«, comenta.
Por su parte, Julian Alaphilippe es otro de los grandes favoritos. El francés, dos etapas en el Tour y una enorme primavera de clásicas a sus espaldas, también llega en buen estado de forma y su punta de velocidad le hace muy peligroso en grupos pequeños: «Estoy realmente motivado, no tengo estrés aunque sea una prueba muy dura. Tendré que ver cómo me siento y si estoy bien al final lo intentaré».