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Tour Francia: Fase decisiva con los Pirineos y la crono final (Recorrido)

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Ya sí que no hay más espacio para las concesiones, dudas o especulaciones varias. El Tour de Francia se acaba. Y como se acaba, es el momento de que todos los que aspiran a algo más alto de lo que ahora mismo tienen acaben echando el resto para lograrlo… o callen para siempre. Antes de llegar a París los corredores tendrán cinco jornadas donde se decidirá la carrera.

Incluidas tres en los Pirineos. Puertos sobradamente conocidos por el aficionado como el Tourmalet, el Peyresourde, Aubisque, Val Louron, Portillon y un largo etcétera se alternan con otros como Saint-Lary Soulan, mucho menos instalados en el imaginario colectivo del seguidor ciclista. Todo eso rematado con una contrarreloj, con un único final en alto que, para más inri, es una etapa de 65 kilómetros. Pero vayamos paso a paso.

Martes 24. 16ª etapa: Carcasonne – Bagnères de Luchon, 218 kms. La más larga de las etapas que quedan hasta París. Lo que se denominaría como una jornada de aproximación a los Pirineos, porque la primera parte es precisamente eso: bajar hacia el sur de Francia para acercarse a la cadena montañosa. Pero para que no se quede sólo en eso, la organización ha incluido un encadenado para acabar. El Portet D’Aspet -5,9 kms al 7,1%- seguido de inmediato por el Col de Menté -7 kms al 8% de media- y, después de unos 15 kilómetros de descanso, la subida al Portillon -8,3 kms al 7,1%-, puertos que ni son eternos ni tienen rampas muy duras, pero tras un día libre y con 200 kilómetros en las piernas se pueden hacer largos.

Miércoles 25. 17ª etapa: Bangères de Luchon – Saint-Lary Soulan, 65 kms. Y para compensar, después de un día largo uno cortísimo. Pero sin un sólo metro plano. A balón parado se sube el Peyresourde hasta Peyragudes. Nada más baja, la subida a Val Louron con sus siete kilómetros por encima del 8% de media. Se vuelve a bajar y se afronta desde Saint-Lary el Col du Portet, con cima a 2.215 metros de altitud después de casi 17 kilómetros de ascenso al 8,3% de media. Sólo hay un pequeño descanso al 5% hacia la mitad de un puerto que, por lo demás, se mantiene siempre entre el 8 y el 10%. La etapa incorpora un sistema de salida en parrilla que será novedoso y llamativo, pero está por ver cuánto aporta realmente en lo deportivo. Lo que sí es seguro, es que se irá a fuego desde el inicio.

Jueves 26. 18ª etapa: Trie sur Bäise – Paul, 171 kms. Penúltimo sprint del Tour, y el último antes de París. Un día donde los favoritos deberían, en teoría, recuperar algo antes de la traca final. Si no hay un equipo de los hombres rápidos que controle -y teniendo en cuenta cuántos se han ido a casa, parece difícil- también podría acabar llegando una fuga.

Viernes 27. 19ª etapa: Lourdes – Laruns, 200 kms. Se acaba la montaña con un final en descenso en Laruns y una etapa larga y complicada. Cumplido un primer tercio con un par de cotas, aunque por terreno más bien incómodo, hacia el kilómetro 70 comienza un encadenado con el Col D’Aspin -12 kms al 6,5%- y, posteriormente, el Tourmalet. Si la carrera se hace viva, en ese puerto siempre pasan cosas, con sus casi 18 kilómetros al 7,3% de media. Después del largo descenso, otro encadenado con el Col des Bordères -8,6 kms al 5,6% y el Aubisque por la vertiente del Soulor. No es una subida al uso, más bien dos. Seis kilómetros constantes al 8%, un descanso largo y tres kilómetros finales al 7%. Desde la cima, serán 20 kilómetros de descenso a tumba abierta hasta Laruns.

Sábado 28. 20ª etapa: Saint-Pee-sur-Nivelle – Espelette, 31 kms CRI. La única contrarreloj en línea de este Tour de Francia llega precisamente el penúltimo día. Lo que quede por decidir, lo hará en este escenario donde, por ejemplo, si Froome no ha podido distanciar antes a Tom Dumoulin, el neerlandés podría perfectamente darle la vuelta. O no. El caso es que son 31 kilómetros incomodísimos, donde las fuerzas harán mucho. Incluso hay un repecho de casi un kilómetro al 10% de media, poco antes del final. Aquí sí, el Tour de Francia tendrá un ganador.

Domingo 29. 21ª etapa: Houilles – París, Campos Elíseos, 116 kms. El brindis inicial. Las fotos para la posteridad. Las poses de aquellos que llevan los maillots de las clasificaciones secundarias, que en el Tour son de todo menos secundarias. Y, para acabar, el tradicional circuito final en los lugares más emblemáticos de París y su previsible sprint. El Tour 2018 será historia en cuanto se cruce la línea de meta.

No hay más tela que cortar más allá del domingo… pero hay mucha tela que cortar desde ahora hasta el domingo. Veremos si el statu quo de la carrera se mantiene o, por el contrario, se le da la vuelta por completo después de estos duros días en los Pirineos.

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