La incertidumbre que supone la crisis mundial motivada por el coronavirus ha afectado a todos los ámbitos de la vida. El deporte no ha quedado al margen de esta pandemia, poniendo en discusión la celebración de las principales pruebas del panorama ciclista internacional.
Si todo vuelve a la normalidad, es probable que una de las clásicas del calendario ciclista se lleve a término. El Tour de Flandes se disputaría sobre el papel el 5 de abril por tierras belgas, dando cabida a los principales corredores del pelotón internacional en estas lides.
Pocos clasicómanos faltarán a la cita, habiendo una igualdad máxima entre un puñado de corredores que ansían triunfar en tierras belgas. Hay un hombre que destaca por encima del resto, y que cuenta con más chances de victoria según apunta la casa de apuestas Bwin. Este no es otro que Van der Poel. El joven corredor intentará ser profeta en su tierra y seguir deslumbrando al mundo con su enorme porvenir. El combinar bicicleta de carretera con competiciones de mountain bike, hace de Van der Poel el ciclista total a sus 25 años, siendo el presente y el futuro del ciclismo mundial.
Pese a su enorme calidad, la victoria del belga en una cita tan exigente como Flandes no será fácil, dependiendo de cómo se vaya desarrollando la carrera. Este monumento del ciclismo, ha sobrepasado las 100 ediciones, llenando de emoción cada curso las calles de todo Flandes Oriental la primera semana de abril.
Los rivales de Van der Poel quieren reinar también en esta cita histórica, cuya victoria en la prueba daría por buena la temporada de cualquier integrante del pelotón. Un triunfo de quilates que hombres como Van Aert, Sagan o Alaphilippe ansían para comenzar su campaña con buenas sensaciones, quitándose presión de cara a los meses sucesivos.
Pese a que haya muchos favoritos, hay ciclistas tapados que pueden dar una sorpresa de campanillas como la que realizó la pasada temporada Alberto Bettiol. Ese 2019 es el claro ejemplo de que las predicciones de los equipos pueden ser papel mojado acerca de cómo se desarrollará una clásica de la entidad del Tour de Flandes.
En ocasiones, suele suceder que los capos del pelotón se vigilan en exceso llegando a los últimos kilómetros de uno de estos monumentos. Ese es el punto, que ciclistas de un peldaño inferior deben aprovechar, como hizo Bettiol, para sembrar de dudas a los jefes de filas, y poder conquistar un entorchado que marque un antes y un después en su trayectoria deportiva.
Es seguro que, si la situación sanitaria mundial lo permite, vivamos un espectáculo único con el Tour de Flandes 2020. Una clásica ciclista con mayúsculas que, pese a sus más de cien años de historia, no deja de sorprender en cada nueva edición que se lleva a término.