Con más de un tercio de temporada disputada, tan sólo basta acudir a una tabla de resultados en el WorldTour (clásicas y vueltas) para comprobar cuáles han sido las bicicletas más ganadoras en lo que va de 2019. De un vistazo, la S-Works Tarmac del Deceuninck-Quick Step y que es la misma que ha montado un exitoso Bora-Hansgrohe, pese a la sequía de Peter Sagan, es la montura que más grandes éxitos ha cosechado en todos los terrenos.
Además, otros dos hitos han marcado el devenir de este año y de la imparable evolución del mercado y la industria de la bicicleta: los primeros Monumentos ganados con frenos de disco –la San Remo de Alaphilippe y la Roubaix de Gilbert- así como que un grupo de doce velocidades haya ganado una gran vuelta, es decir, el Giro de Richard Carapaz con el Campagnolo Super Record EPS.
Es cierto que Specialized se lleva la palma con su Tarmac, pero tampoco hay que perder de vista la Argon 18 Gallium Pro que en ningún tramo de temporada ha parado de vencer con el equipo Astana: tanto generales como Valencia o País Vasco con Ion Izagirre, Cataluña con Superman López, las dos etapas del Giro de Pello Bilbao e incluso la monumental Lieja-Bastoña-Lieja de Jackob Fuglsang. Además, la Gallium Pro del fabricante canadiense amenaza con subirse al podio del próximo Tour de Francia de la mano del ciclista danés, ya que sus ambiciones son máximas.
Otras grandes marcas también han obtenido sus éxitos y merecida cuota de protagonismo. Por ejemplo, si agradable fue cómo el italiano Alberto Bettiol daba la sorpresa en el Tour de Flandes con su arrancada y escapada final, no menos agradable fue vivir cómo un fabricante emblemático como Cannondale volvía a lo más alto con su Supersix EVO Hi-Mod. Desde tiempos de Peter Sagan, Vincenzo Nibali o Ivan Basso en el equipo Liquigas no habían sumado un triunfo de este calado, y eso que es una marca acostumbrada a los grandes éxitos.
Mathieu Van der Poel ha sido el otro gran nombre propio en Primavera. Le hemos visto ganar con hasta tres Canyon distintas en tres disciplinas diferentes: ciclocross, ruta y ahora también pruebas de la Copa del Mundo de mountain bike. Pero en este punto conviene centrarse en la montura que le ha convertido en un coloso: la Canyon Aeroad CF SLX en su versión de frenos de disco, ruedas de perfil Dura Ace y obviamente el grupo electrónico R9150 del fabricante nipón. Ha sido la bicicleta de la histórica remontada en la Amstel Gold Race o en su victoria en A Través de Flandes dominando a su antojo la carrera. Y ojo porque el prodigio neerlandés y nieto de Raymond Poulidor amenaza con correr el próximo Mundial de ruta de Yorkshire y dentro de unos meses tal vez nos toque describir a fondo esta bici en esta sección de Zikloland.
En ciclismo sólo puede ganar un ciclista y por tanto una sola bicicleta. Las grandes derrotadas –de momento- en lo que va de temporada son las Cervélo R5 y S5 del Team Sunweb, la Giant TCR Advanced de un lagunar Greg Van Avermaet en su estreno en el CCC y también las BMC tanto Timemachine como Roadmachine del Dimension Data. Casualmente, estos grandes equipos del WorldTour cambiaron de fabricante el pasado invierno en aquel llamativo movimiento en el que no sólo se permutaron patrocinadores entre equipos, sino también tres fabricantes de primerísimo nivel. Tal vez Tom Dumoulin en el Tour de Francia o el propio Van Avermaet –no brilló en clásicas pero se llevó triunfos de etapa en Valencia- así como Mark Cavendish en algún esprint, puedan deshacer esta inexplicable sequía en clásicas o generales de las pruebas WorldTour. De hecho, Boasson Hagen lograba el domingo la primera victoria en el WorldTour para el Dimension Data.
Un total de 32 victorias lleva cosechadas el Deceuninck-Quick Step por 24 del Bor-Hansgrohe, es decir, un total de 56 victorias en el momento que fue escrito este reportaje y que como se ha citado anteriormente, corresponden de forma mayoritaria al modelo Tarmac. Han sobresalido en clásicas con Stybar y la Strade Bianche, Alaphilippe en San Remo y especialmente el modelo Roubaix de Gilbert conquistando ‘El Infierno del Norte’.
Pero acudamos a datos más llamativos. La marca californiana se congratulaba tras la victoria de Gilbert por un material propio que llevaban tiempo desarrollando: los neumáticos. La Roubaix S-Works venía montada con las Turbo Tires, en dos medidas de 28 o 30 milímetros de balón, a elección del corredor y también con sus ruedas Roval CLX 50 para frenos de disco, también fabricadas y suministradas por Specialized. En este tipo de carreras donde un pinchazo puede arruinarlo todo, tuvieron cero pinchazos a lo largo de 257 kilómetros de carrera incluyendo esos tortuosos tramos de pavé.
Además, el compromiso de esta marca en la lucha contra los pinchazos parece firme, ya que en el pasado Tour de California también ensalzaron su Project Black, un desarrollo de cubiertas tipo tubeless con las que su esprínter Fabio Jakobsen obtuvo una victoria, incluso pinchando en los últimos kilómetros. La marca no ofrece más información por el momento y en los próximos meses tendremos más información al respecto, pero no deja de llamar poderosamente la atención que estén dedicando tantos esfuerzos en este apartado, más si cabe habiendo tantas marcas especializadas incluso con más de un siglo de experiencia.
En estos primeros meses de competición en los que Specialized ha cosechado tantos éxitos, la marca californiana también anunció la extensión de su acuerdo hasta 2021 con el equipo Bora-Hansgrohe. Fue en los prolegómenos del Tour de California donde su principal estrella, Peter Sagan, volvió a cantar victoria tras su gris Primavera. Repasando la comunicación oficial que hicieron tras sellar este acuerdo, se hablaba de que estas bicicletas seguían cosechando campeones de futuro. Tanto es así que tan sólo basta repasar el pedazo de Itzulia de los alemanes Max Schachmann y Emanuel Buchmann, así como la revelación de los esprints del Giro de Italia, Pascal Ackermann con sus triunfos parciales y el premio de la maglia ciclamino.
Doce pasos adelante
Si bien la mayoría de equipos del World Tour y Profesionales Continentales montan el grupo Shimano Dura Ace R9150, en este apartado de montaje hay dos hitos llamativos. Ya se ha comentado anteriormente con la primera gran vuelta ganada con un grupo de doce velocidades con Richard Carapaz. Pero es que en el pasado Giro de Italia otro grupo de doce, el SRAM Red eTap AXS también cosechó su primera gran victoria gracias al impulso del renacido Ilnur Zakarin.
Campagnolo y SRAM son minoría al máximo nivel, por eso son más llamativos sus triunfos. El equipo Trek-Segafredo es el otro WorldTour que apuesta por este renovado grupo Red eTap AXS y también tuvo premio grande con Giulio Ciccone ganando una etapa de montaña y la maglia azzurra como mejor escalador y el Lotto-Soudal, que de la mano de Caleb Ewan también estrenó su casillero con doce velocidades.
A estas alturas, hablar de frenos de disco sí o no en ciclismo profesional ya no es noticia. Nos hemos acostumbrado a verlos y, lo más importante en este sentido, ya no se genera ningún debate –al menos de puertas para afuera- respecto a que ponen en riesgo la seguridad en caso de caídas. Hace más de dos años y cuando ese debate estaba en plena efervescencia, en Zikloland nos atrevimos a aventurar que cuando un ciclista montando una bici con discos gane una etapa del Tour de Francia e incluso la propia carrera, será cuando ya se haya naturalizado y aceptado al cien por cien.
Ese día, aunque está cada vez más cerca, todavía no ha llegado pero en lo que va de 2019 hemos asistido a grandes victorias en diferentes escenarios con este cada vez menos controvertido sistema de frenado. Por tanto, nos reafirmamos: han triunfado naturalizando este debate. Se gana con discos. ¿Y? Ya son el presente.