La contrarreloj a relevo mixto reemplaza este domingo en el Mundial de Yorkshire a la contrarreloj por equipos comerciales, que se llevaba disputando desde 2012. La modalidad ya se estrenó en los Campeonatos de Europa, con victoria para Holanda.
Al ser una novedad en estos Campeonatos del Mundo, su funcionamiento todavía es un poco confuso. Será la primera vez que hombres y mujeres pedaleen por un mismo objetivo, en una apuesta de la UCI por la igualdad de género en el ciclismo.
Cada nación ha tenido que seleccionar a tres hombres y tres mujeres para la contrarreloj. Por ejemplo, España cuenta con los ciclistas Jonathan Castroviejo, Lluís Mas y Sebastián Mora, y las ciclistas Lourdes Oyarbide, Mavi García y Sheyla Gutiérrez.
Los tres hombres se encargan de la primera mitad de la contrarreloj, mientras que las mujeres esperan en la zona de relevo para abordar la segunda mitad del recorrido. El tiempo final dependerá igualmente del rendimiento del trío masculino como del femenino.
En la «relay zone», los hombres pasarán el testigo a las mujeres.
Por lo tanto, Castroviejo, Mas y Mora darán la primera vuelta al circuito de Harrogate, de 14 kilómetros. Cuando cruce la línea de relevo el segundo ciclista, Oyarbide, García y Gutiérrez afrontarán la segunda vuelta al mismo circuito. La segunda ciclista en meta marcará el tiempo definitivo de la selección.
Al correr de manera independiente, la prueba no requiere un esfuerzo de coordinación entre hombres y mujeres, pero sí entre sus compañeros de trío, ya que no se disputan cronos por tríos durante la temporada, a excepción del relevo mixto de los Campeonatos de Europa.
David Lappartient, presidente de la UCI, quiere promover esta nueva modalidad que ha convertido en una apuesta personal. De momento, la ha dotado de una gran cantidad de puntos para el World Ranking. Y, dependiendo de su aceptación, estudiará incluirla en los Juegos Olímpicos de Paris 2024.