El ciclismo portugués va en serio. Muy en serio en su lucha contra el dopaje. La Federación Portuguesa de Ciclismo y la Autoridad Portuguesa Antidopaje (ADoP) han presentado en la sede del Comité Olímpico Portugués un nuevo protocolo de cooperación en la lucha contra el dopaje con una herramienta muy eficaz: todos los equipos continentales estarán sometidos a un pasaporte biológico.
El plan estará en vigor durante las temporadas 2023 y 2024 y supone un refuerzo de la lucha antidopaje en el ciclismo portugués, en el ámbito del control y la prevención, pero también de la formación y sensibilización de los agentes deportivos. Una de las medidas más significativas del protocolo es la extensión a los 92 ciclistas de los equipos continentales portugueses de la UCI de los controles del pasaporte biológico, una de las herramientas más eficaces para controlar y prevenir el dopaje.
Esta medida implica una inversión de recursos operativos, logísticos y financieros por parte de la Agencia Antidopaje de Portugal, ya que habrá que realizar cientos de controles anuales del pasaporte biológico y procedimientos analíticos adicionales, estimados en un coste de 70.000 euros. La Federación Portuguesa de Ciclismo deberá entregar unos 50.000 euros a la ADoP para la activación del protocolo. Parte de esta cantidad será sufragada por los equipos, mientras que la Federación asumirá los costes con los ciclistas sub-23 de los equipos continentales. Además, habrá dos sesiones presenciales, una para equipos y corredores del norte y otra para corredores y equipos del sur de Portugal, donde se explicarán todas las nuevas medidas para la lucha contra el dopaje.
«Hoy damos un paso de gigante en la lucha contra el dopaje y en el fortalecimiento del ciclismo. Tomando el nombre de Tour del Futuro, yo diría que estamos haciendo un tour para el futuro», dijo el presente de la ADoP, Manuel Brito, durante la ceremonia de firma del protocolo, subrayando que esta inversión es posible gracias al aumento del presupuesto de la ADoP en el orden del 60 por ciento y a la reacreditación del Laboratorio de Análisis de Dopaje.
El presidente de la Federación Portuguesa de Ciclismo, Delmino Pereira, consideró: «Se trata de un momento histórico a nivel mundial, porque es la primera vez que una de las 201 federaciones afiliadas a la UCI adopta un programa de esta dimensión«. El dirigente recordó que el nivel de exigencia para los equipos continentales portugueses es similar al que se impone a los WorldTeams y a los ProTeams, destacando los efectos positivos que el mayor control tuvo en el pelotón internacional.
«A escala internacional, este tipo de medidas han tenido éxito. El ciclismo mundial crece, surgen nuevos ídolos, aumenta la inversión del público y de los patrocinadores. También hay nuevas demandas de las marcas, que exigen verdad deportiva. Y sólo con más inversión podrá crecer el ciclismo. No hay otro camino», dijo Delmino Pereira.