Y en la última de las jornadas para la contrarreloj individual, llegó la primera de las medallas para España en el Mundial de Ruanda, un país que siempre será recordado de forma más que dulce por Paula Ostiz, flamante subcampeona mundial de la especialidad en la categoría júnior.
La contrarreloj para féminas júnior se disputó sobre poco más de 18 kilómetros e incluía el trazado final de un Mundial que se está desvelando como muy exigente en lo físico por los perfiles, pero también por la altitud. El oro acabó sobre los hombros de la neerlandesa Megan Arens, quien marcó una media ligeramente por encima de los 42 kilómetros por hora y paró el reloj en 25-47.
La plata acabó siendo para una Paula Ostiz que tiene en su horizonte en el corto plazo el salto al WorldTeam de la mano de Movistar. La corredora española se quedó a 35 segundos del oro, por lo que no podemos afirmar que estuvo cerca de ganar el maillot arcoíris.Eso sí, nadie puede dudar de la calidad de una corredora que ya fue campeona de Europa contrarreloj en 2024 y subcampeona mundial de fondo en carretera también en 2024. Y ahora más que nunca hay que citarla como candidata al oro en la prueba de fondo en carretera.
La neerlandesa fue claramente mejor en la prueba de contrarreloj. Y así lo certifican todas las distancias sumadas. La tercera plaza fue para la noruega Oda Aune Gissinger, quien cedió 37 segundos respecto de la mejor del día. La otra representante española, Alejandra Neira, acabó en 17ª posición a 1-58 de la ganadora.
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