Vincenzo Nibali ya mira hacia la primera parada de un camino que le llevará hasta julio, cuando disputará el Tour de Francia con el inequívoco objetivo de ganarlo. El campeón italiano, jefe indiscutible del Bahrain-Merida, comenzará en la Vuelta a San Juan.
Llega confiado tras un buen 2017, pero no se conforma: «Confío en que el próximo año sea aún mejor», asegura el ‘Squalo’ a la organización de la carrera argentina. No en vano, las cuatro victorias de la recién acabada temporada son de enorme calidad además de haber pisado el podio en Giro y Vuelta. Por si fuera poco, Bahrain-Merida se ha reforzado aún más: «Han llegado corredores con experiencia como Gorka Izagirre y Domenico Pozzovivo, y jóvenes con talento como Mohoric. Vamos a ser aún más competitivos», vaticina.
El Tour centrará sus esfuerzos, pero en el camino también tiene otras pruebas en el punto de mira: «Soy corredor de grandes vueltas y lucharé por ellas, pero también me gustaría disputar las clásicas de primavera. En concreto Lieja, y el Campeonato del Mundo en otoño porque tiene un recorrido duro que me va muy bien».
Nibali y sus 50 victorias. Foto: ilombardia.it
En Argentina todavía llegará verde y con la intención de coger ritmo. Pero eso no quita para que tenga ganas de ir empezando: «Para mí, debutar en Argentina se ha convertido en una tradición. La forma no será la mejor, pero quisiera al menos ganar una etapa», explica el de Messina.
Finalmente, tras haber un balance positivo del 2017 y señalar que no es «nada sencillo» subir al podio de dos grandes y ganar Lombardia, Nibali ha tenido palabras para su rival recién retirado Alberto Contador: «Nos va a faltar a todos. Es un ciclista que gusta porque jamás se rinde y siempre es capaz de sorprender. Probablemente el ciclismo va a ser menos divertido sin él», concluye.
