Lo ha intentado todo, pero Mikel Landa no ha podido dar el zarpazo que esperaba al Tour. El ciclista de Murgia ha entrado en el grupo de los elegidos, pero durante un buen rato ha llegado a ser segundo virtual de la general de la carrera. Finalmente se ha tenido que conformar con el premio al ciclista más combativo del día.
“Había que probarlo de lejos y me voy tranquilo por haberlo intentado. Cuando he arrancado en el Tourmalet sabía que sería muy difícil, pero en algunos momentos he llegado a soñar con la etapa e incluso con el podio en la general. El trabajo del equipo ha sido enorme, especialmente de Andrey, que ha demostrado ser un corredor impresionante y un tío increíble«, ha declarado recién cruzada la meta.
Sin embargo, había demasiados implicados y todos buscaban algo: «Por desgracia, ha sido un día muy complicado, con bajadas en las que dar muchos pedales, compañeros de viaje que a veces no entregaban todo lo que tenían… y que atrás también se han obcecado mucho, hasta cazarnos en el Aubisque. En esa bajada Roglic nos ha tomado unos metros y me he quedado fuera de la disputa de la etapa».
💪 @MikelLandaMeana is today’s most aggressive rider!
— Le Tour de France (@LeTour) 27 de julio de 2018
💪 @MikelLandaMeana est le combatif du jour !#TDF2018 pic.twitter.com/ISMZT50BXt
Para Landa, los intereses en juego por parte de otros equipos han acabado por minar las posibilidades de triunfo de su aventura: «Ha sido una lástima no poder corresponder al trabajo de Amador, pero siempre hay equipos con intereses por ahí: el trabajo de Katusha para defender un 10º puesto; Lotto poniendo ritmo y haciéndole también el trabajo a Sky… Siempre aparece uno que nos amarga la ‘fiesta’. Nairo y yo habíamos hablado antes de la etapa y él estaba con ganas, aunque quizás no haya podido estar tan fresco como antes de la caída; supongo que al final le ha pasado factura», ha manifestado.
Haciendo un poco de balance a falta de la crono final, Landa se da por moderadamente satisfecho: «Ha sido un Tour en el que he tenido de todo, momentos buenos y malos. Mañana me gustaría hacer una buena contrarreloj y terminar de asentar la línea de resultados tan regular que he tenido este año. Es la primera que vengo al Tour con verdaderas aspiraciones -el año pasado hice 4º no sé si de rebote, pero sin venir a pelearlo- y por ello, me iré satisfecho independientemente de cómo acabe tras la CRI”, ha concluido.