Era, sobre el papel, el cuarto hombre de Orica-Scott. Pero en la clasificación general se sitúa como el segundo mejor corredor del equipo australiano. Jack Haig está realizando una más que interesante Vuelta a España al servicio de Esteban Chaves y los hermanos Yates, al principio, y ahora centrando sus esfuerzos en ayudar al escalador colombiano. A sus 24 años -cumplidos ayer mismo- y en su segunda grande, Haig está demostrando ya piernas para ir cerca de los mejores.
Sin ir más lejos, ayer en Los Machucos fue el que mejor rindió del equipo. Chaves intentó una jugada táctica lejana que no le salió, y se acabó dejando casi seis minutos en meta. Mientras tanto, Haig entraba varios segundos por delante de Froome en la cima cántabra, dejando claro que está acabando fuerte esta Vuelta.
“Está rindiendo muy bien. Es un chico con mucho talento y buen margen de progresión, estamos muy contentos con él. Está rindiendo tal y como esperábamos”, dice sobre él su director, Neil Stephens. El año pasado hizo su debut en la ronda española, pero el cúmulo de esfuerzos le acabó pasando factura. “Tuvo un par de días malos que le pesaron. Este año lo estamos dosificando, y lo va a hacer bien”.
Haig, ganador de etapa en Polonia. Foto: Tour de Pologne
Además, Haig es un ciclista con margen de mejora en varios aspectos. Stephens los tiene ya identificados y piensa hacer lo necesario para que el corredor supere esas debilidades y dé un salto de calidad definitivo: “Todavía le falta ser un poco más consistente. Tener más regularidad, y también adaptarse mejor al frío”.
Pero en Orica-Scott confían en él. Este año ha inaugurado su palmarés en la máxima categoría, hace apenas un mes con una etapa de la Vuelta a Polonia… y los australianos piensan que puede ser un hombre a tener en cuenta para las grandes vueltas: “¿Por qué no? Tiene buena actitud, un físico que se adapta bien. Lo normal es que el año que viene empiece a disputar vueltas de una semana. Si mantiene el espíritu que tiene, podrá ser bueno en las vueltas de tres semanas”, asegura Stephens.
Hace dos años, en el Tour del Porvenir, Haig fue segundo por detrás de Marc Soler. Sin el estruendo que ha provocado el catalán por su rendimiento en pruebas como la Volta, el australiano sigue su progresión paso a paso rodeado de un bloque fuerte que mantiene el rumbo de su reconversión de conjunto rodador y de valocistas a luchar por vueltas por etapas. Haig será parte importante de ese proceso, si todo va bien, dentro de poco. De momento, sigue siendo el cuarto, ¿o segundo?, hombre de Orica.
