El ciclista de la selección española de pista Albert Torres se ha impuesto con maestría en el Omnium del Campeonato del Mundo de Pista de Santiago de Chile tras demostrar que era el más fuerte de todos los corredores en una competición que se compone de la suma de otras muchas pruebas.
El velódromo de Santiago de Chile pasará a la historia del ciclismo español por ser el escenario en el que Albert Torres, tras una carrera mayúscula, puso el gran colofón a su carrera profesional proclamándose campeón del mundo de ómnium. El ciclista de la selección española ha logrado una victoria que perseguía desde hace años y que, por fin se ha hecho, realidad gracias a una actuación muy sólida en las cuatro pruebas del ómnium que le han permitido concluir la jornada con 133 puntos y superar por la mínima al japonés Kazushige Kuboki y al belga Lindsay de Vylder.
La competición arrancó con Torres cuarto en el scratch, una buena posición que le permitió desarrollar confianza de cara al resto de la competición. En el tempo race fue tercero, al igual que en la prueba de eliminación, donde gestionó la carrera de forma impecable manteniendo la cabeza del grupo y exhibiendo una lectura de carrera propia de un especialista consumado. Estos resultados le llevaron a iniciar la decisiva puntuación final en primera posición.
En la prueba de puntuación, la tensión y emoción fueron máximas hasta el último sprint. Torres dependía de que el danés Larsen no ganará el sprint final para hacerse con el arcoíris y así fue. Su fantástica gestión de la prueba final dio sus frutos y al cruzar la línea de meta, empapado en lágrimas de alegría y alivio, se coronó como campeón del Mundo. El merecido premio a una carrera extraordinaria en la que faltaba el arcoíris en la gran prueba olímpica individual y que por fin ya figura en su palmarés. Atrás quedan las fracturas de clavícula de este año y la caída en los Juegos de París para que este triunfo adquiera más valor que nunca.
TEXTO – FOTO: RFEC
