El pelotón español crece en cantidad y calidad

Foto: Bettini / Movistar Team

El Movistar Team al frente del pelotón. Foto: Movistar Team

La crisis ya es cosa del pasado. Al menos, si hablamos de la crisis del pelotón profesional español. Esta temporada pasará a la historia como la del cambio de ciclo, puesto que incrementamos el número de equipos de forma notable: de cuatro en 2017 a seis en 2018. Y lo mismo podemos decir del número de corredores: ¡También crece!

Después de una fuerte crisis económica en España, con pinchazo de burbuja crediticia de por medio, el pelotón fue perdiendo más y más equipos hasta llegar a una situación inferior a la media histórica y alarmante desde todos los puntos de vista. Movistar Team se mantenía como único equipo WorldTour; Caja Rural-Seguros RGA era la única baza en la categoría profesional, mientras que en continentales sobrevivían Burgos-BH y Euskadi-Murias. En total, cuatro equipos en categorías profesionales.

Si hacemos un desglose por categorías, teníamos en el pelotón español sólo 15 ciclistas en WorldTour, 13 en profesionales y 28 en continentales. La cifra total ascendía en 2017 a 56 corredores nacionales en los equipos de las tres categorías. La señal de debilidad más evidente era la falta de aspirantes locales a las invitaciones de la Vuelta a España. Si en Francia o en Italia hay más candidatos que plazas (4), Unipublic se encontraba en la situación contraria: invitaba a Movistar Team y Caja Rural-Seguros RGA y se quedaba siempre con dos plazas libres.

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La plantilla del Euskadi-Murias.

Pero todo eso ha cambiado para 2018. La mejora económica en el país empieza a dejarse sentir en los departamentos de márketing de las empresas. Burgos-BH y Euskadi-Murias decidieron el pasado verano abandonar la categoría continental y dar el paso a profesionales, lo que significa un salto más que considerable en la estructura del pelotón nacional. El primero lo hizo de la mano de las instituciones públicas burgalesas, pero también de la marca de bicicletas BH y de un buen número de pequeños patrocinadores que han querido acompañar a Julio Andrés Izquierdo en la nueva aventura. El equipo vasco, en cambio, lo hacía de la mano del impulso dado por la empresa constructora Murias.

De repente, hay hasta tres candidatos a una de las invitaciones de la Vuelta a España de 2018, lo que coloca a Unipublic en la situación contraria a la de hace un año: si antes tenía plazas libres, ahora siente la misma presión que el resto de los grandes organizadores.

E igual de positiva hay que considerar la apuesta de dos ciclistas (uno ya ex) de lanzar proyectos profesionales más vinculados con la base de nuestro deporte. La Fundación Alberto Contador, respaldada por las marcas comerciales Polartec y Kometa, y la Fundación Euskadi, de la mano de Mikel Landa y con el respaldo financiero, entre otros, de Orbea y EtxeOndo, dan el salto a la categoría continental, algo realmente importante para trabajar con los jóvenes en el corto plazo, pero, además, prometedor pensando en la opción de que estos proyectos puedan desarrollarse deportiva y económicamente hasta el punto de dar también el salto a profesionales.

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La plantilla de la Fundación, con el director Jorge Azanza.

De todos modos, ciñéndonos a los datos reales, debemos concluir que ahora mismo no ha habido crecimiento nacional en dos categorías: el pelotón WorldTour español está formado en 2018 por 14 corredores (1 menos que en 2017) y el continental por 15, lo que significa 13 ciclistas menos que en 2017, puesto que la Fundación Contador ha confeccionado una plantilla muy internacional con sólo cuatro españoles.

El gran salto cuantitativo y cualitativo llega en la categoría profesional: si en 2017 había 13 profesionales, en 2018 habrá nada menos que 41, es decir, 28 más. En total, las cifras son muy positivas: el pelotón español pasa de cuatro a seis equipos y de 56 a 70 corredores. Y todo ello por no hablar de los emigrantes, que siguen siendo muchos. Pero eso merecerá un capítulo extra. La conclusión, por ahora, es que el cambio de tendencia es más que positivo y se están poniendo los mimbres para que el crecimiento sea sostenido con nuevos equipos profesionales y con equipos continentales que nacen con la ambición de dejar de serlo pronto.